La conexión ferroviaria con el puerto exterior de Caneliñas está sufriendo un nuevo retraso, en este caso de seis meses, con respecto a los plazos previstos inicialmente, al no haberse aprobado todavía el estudio constructivo adjudicado a la empresa Prointec en octubre de 2013 por casi 810.000 euros. Esta demora se suma a las anteriores, que en su conjunto ascienden a más de una década.
A comienzos de 2013 parecía que el tren a la dársena exterior se desbloqueaba al fin. El anuncio de licitación del proyecto constructivo en enero y la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental, que tanta oposición social había generado, sacaron del ostracismo una actuación que dio sus primeros pasos en 2003, cuando el Puerto de Ferrol impulsó un estudio informativo.
Un año después, en enero de 2014, la Dirección General de Ferrocarriles, dependiente del Ministerio de Fomento, dio el visto bueno a la opción sur –que atraviesa la ensenada de A Malata en un viaducto y un túnel desde A Graña hasta la explanada del puerto exterior– y, un día después, el BOE hacía pública la decisión de adjudicar a Prointec –el contrato se formalizó seis semanas antes– la redacción del proyecto constructivo. El plazo para entregarlo era de ocho meses.
cuatro años
En junio del año pasado, Fomento señaló que “la obra es muy compleja por ser un túnel y hay que hacer una campaña geotécnica que posiblemente haga que el plazo de prolongue algo más” con respecto a las previsiones iniciales, es decir, antes de agosto.
Desde que el departamento que dirige Ana Pastor comunicó este “posible” retraso han pasado siete meses y medio, con lo que, en el mejor de los casos, la conexión por tren con Caneliñas no habrá concluido antes de 2020.