Arde una vivienda sin suministro eléctrico a causa de una vela

El parque de Bomberos de Ferrol se movilizó al completo ayer por la mañana para sofocar un incendio en pleno barrio de A Magdalena y rescatar al inquilino de la vivienda afectada. 
El fuego comenzó en el salón de un primer piso, en el 126 de la calle Real –justo encima de la farmacia Adrio–, sobre la una y cuarto de la tarde. En el momento del incendio un hombre de 34 años, con iniciales A.G.P., se encontraba dentro de la vivienda. Según relataron algunos testigos, el joven salió por una de las ventanas pidiendo auxilio a los transeúntes, que en un primer momento intentaron sacarlo del inmueble con la ayuda de una escalera de obra.
Además, otros vecinos pudieron acceder, no sin dificultades, a la vivienda incendiada y vaciaron un extintor para sofocar las llamas. Inmediatamente, con la ayuda de la Policia Local, sacaron al joven de su domicilio –a medio vestir–, que fue atendido en un coche patrulla mientras no llegó la ambulancia medicalizada del 061 para trasladarlo al Arquitecto Marcide.
Pocos minutos después llegaron al lugar de los hechos los dos dispositivos de Bomberos y lograron sofocar por completo el incendio. Ya desde el exterior, con la ayuda del camión grúa, enfriaron el resto de estancias y ventilaron el edificio.
El inquilino de esta vivienda, la única habitada de las cuatro de las que consta el edificio, explicó a los agentes, una vez en la calle, que la casa no cuenta con suministro eléctrico, lo que le obliga a usar velas y hornillos de gas. Todo parece indicar que fue, precisamente, una de esas velas la que prendió el sofá del salón y provocó el incendio en cadena. Varias estancias del inmueble quedaron calcinadas, así como numerosos enseres personales.
La inmensa columna de humo, que abarcaba toda la manzana, desde la calle de La Coruña hasta Sánchez Barcaiztegui, atrajo a cientos de curiosos hasta el lugar del suceso, aunque la Policía Nacional ya había establecido un perímetro de seguridad. Los comercios próximos a la vivienda que todavía permanecían abiertos a esa hora, cerraron   sus puertas momentáneamente para evitar el denso humo.