Ganar es el único objetivo con el que se desplazan los jugadores del Racing a tierras asturianas para hacer frente al partido que esta tarde, a las 16.30 horas, disputan en el terreno de juego de Mareo ante el Sporting de Gijón B, con arbitraje del colegiado madrileño David Gálvez Rascón.
Después de cuatro jornadas sin conocer la derrota y tras derrotar al Oviedo hace siete días, el cuadro verde no puede permitirse un tropiezo si no quiere ver cómo se le escapan sus principales rivales en la lucha por meterse en la promoción de ascenso a Segunda División. Sería el perfecto final para una semana que ha venido marcada por el buen ambiente en el seno del conjunto departamental después de la contundente victoria en la confrontación ante el gran favorito del grupo
Para hacer frente a este compromiso, el equipo ferrolano no podrá disponer del lesionado Iosu Villar, que se recupera de una rotura fibrilar que todavía le tendrá algo más de un mes alejado de los terrenos de juego. Además, el cuerpo técnico decidió dejar fuera de la convocatoria a Jonathan Aspas, Brais Abelenda y Cristian, mientras que el resto de integrantes de la plantilla están citados a las 08.45 horas para iniciar el desplazamiento a tierras gijonesas.
Sobre el papel, el cuadro verde acude a un terreno de juego en el que es posible mantener la escalada en la clasificación, ya que su adversario solo ha sido capaz de sumar tres puntos en otros tantos partidos, pero todavía no conoce la victoria en el campeonato, por lo que los jugadores verdes tratarán que siga sin hacerlo al final de los noventa minutos de juego.
Los malos resultados de la formación asturiana han llevado a que su entrenador se decante por variar su habitual sistema de juego, tradicionalmente muy alegre y mirando más a la portería contraria que a la propia. Ahora trata de que sus jugadores estén más cerrados y tratando de no encajar demasiados goles, buscando la rapidez de sus futbolistas en el contraataque para resolver –hasta el momento sin embargo no ha dado los frutos esperados–.
En cuanto al equipo inicial que pondrá en liza el conjunto departamental, no se esperan demasiadas novedades con respecto al conjunto que jugó ante el Oviedo, ya que el buen papel realizado por ese once puede llevar a que Manolo García se decida por los mismos futbolistas. La única novedad podría venir en el centro de la zaga, ya que el técnico está alternando en esa posición a Antonio y Víctor Vázquez.
De esa forma, Mackay estará en la portería con Álvaro en el lateral derecho y Maceira en el izquierdo, junto con Tena y Antonio o Víctor Vázquez en el centro de la zaga. Por delante se situará Iván Forte, con Adrián Cruz y Dani Rodríguez, mientras que en la banda derecha jugará Diego Vela y en la izquierda Pablo Rey con Joselu como hombre más adelantado de los racinguistas. La plantilla departamental efectuó ayer la última sesión de entrenamiento de la semana, en la que repasaron lo que quiere el cuerpo técnico que hagan en la contienda de esta tarde y se pudo comprobar que todos los futbolistas están con ganas de que llegue el encuentro para intentar darle una nueva alegría a la afición en forma de triunfo.
El cuadro asturiano también tratará sin duda de que los tres puntos se queden en su casillero, ya que es consciente de que la única opción que tiene de mantener la categoría es conseguir el mayor número de victorias posibles en su terreno de juego.
Se espera una gran presencia de aficionados ferrolanos en el campo de Mareo, dada la poca distancia entre ambas localidades y el buen ambiente generado con el triunfo de la pasada jornada en A Malata. n