El Concello de Cabanas tiene intención de que la empresa Prace inicie el próximo lunes las obras de demolición de las dos plantas ilegales del edificio O Penso. De hecho, la Policía Local colocó ayer carteles en las vallas instaladas la semana pasada en el perímetro de la actuación en los que se ruega a los vecinos del inmueble que a partir de las ocho de la tarde de mañana, domingo, no aparquen sus vehículos en la zona acotada para evitar que puedan sufrir daños con motivo de las obras.
Como ya se informó en su momento, el Concello solicitó a la sala de lo Contencioso Administrativo del TSXG el apoyo de la Guardia Civil para proteger a los operarios de Prace en el desarrollo de las obras.
Mientras tanto, los propietarios afectados hicieron público ayer un comunicado en el que manifiestan que no existe autorización judicial para que el Concello de Cabanas ni la empresa adjudicataria entre en el edificio, añadiendo que tampoco les consta que el Ayuntamiento haya practicado todo lo que la orden de demolición exigía.
Indican, asimismo, que en ausencia de autorización y determinación de las circunstancias de la demolición “ni los vecinos imposibilitan la entrada ni paralizan la ejecución de la obra, ya que no hay obligación de soportar la violación de los domicilios, ni el Concello, a través de la adjudicataria, puede comenzar legalmente la demolición”.
Los propietarios insisten en que el posicionamiento de los vecinos en ningún caso ha sido obstrucionista con la ejecución de la sentencia, sino de pretender una correcta ejecución de la misma para todos, adoptando las medidas de seguridad oportunas, determinando las circunstancias de la ejecución y abonando las indemnizaciones a los afectados.
Señalan, por último, que el Concello “proporcionó irregularmente una llave del portal a la empresa”, hecho que esta reconoce en un escrito.