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sábado | 20 abril | 2024
Las relaciones comerciales entre el grupo naval público Navantia y Arabia Saudí se estrecharon aún más en las últimas horas tras la firma de un contrato por valor de unos 900 millones de euros para la integración de sistemas de combate en las corbetas Avante 2200, que están siendo fabricadas en Puerto Real, Cádiz.
La firma entre el ente español y la empresa estatal de defensa SAMI –Saudi Arabian Military Industries–, se realizó en el marco de la feria internacional DSEI 2019, que dio comienzo el pasado miércoles en Londres y que hoy mismo cerrará sus puertas hasta dentro de dos años.
La relación entre ambos grupos alcanzó un punto crucial a principios de año con la formación de una alianza estratégica –concretada en su momento por el antiguo presidente de la entidad española, el mugardés Esteban García Vilasánchez– para el desarrollo de tecnologías clave bautizada como Sanni –Saudi Arabia Navantia Naval Industries–.
Precisamente, esta “joint venture”, en la que el grupo hispano participa en un 49%, fue la catalizadora del acuerdo, que incluirá además, según informa el portal Infodefensa, la ingeniería de sistemas; el diseño de hardware; el desarrollo de software; la realización de pruebas, verificaciones y demás; y, finalmente, la logística y formación.
En la rúbrica del millonario contrato participaron la presidenta de Navantia, Susana de Sarriá, y los directores ejecutivos de SAMI y Sanni, Andreas Schwer y Antonio Rodríguez-Barberán, respectivamente.
De este modo, la máxima dirigente del ente público español afirmó que este proyecto “subraya el compromiso de Navantia de apoyar a Arabia Saudí en el desarrollo de sus capacidades industriales en el sector de la defensa”, añadiendo que garantizará la cooperación a largo plazo. l
