La presencia policial en las calles de la ciudad naval comenzará a incrementarse paulatinamente conforme se aproxima el pico de contagios por coronavirus, que las autoridades sanitarias situaron a lo largo del mes de abril. El alcalde, Ángel Mato, anunció ayer durante la reunión diaria de la comisión de Seguridade que la Policía Local coordinará con la Nacional “novos operativos” para reforzar la seguridad y el cumplimiento de la cuarentena, siguiendo las órdenes del Gobierno central.
Así, el regidor ferrolano solicitó “paciencia e comprensión” a la ciudadanía, recordando “a necesidade de que todos sexamos máis conscientes que nunca de que só se conseguirá superar a crise actuando con responsabilidade”.
Cuarenta denuncias
El aumento paulatino de la presencia policial se podido observar con el paso de los días, donde se registró, además, un notable incremento en el número de multas por no respetar las normas de seguridad estipuladas por Sanidad. De este modo, el Concello detalló que desde el pasado día 16 se tramitaron cuarenta denuncias: cuatro de ellas esa misma jornada, tres el 17, ocho el 18 y 25 el pasado jueves.
Por otro lado, la Guardia Civil, que está coordinando un operativo con la Dirección General de Tráfico (DGT) para evitar desplazamientos durante el fin de semana, informó de dos nuevas denuncias en la comarca. Por una parte, se identificó y multó a un vecino de Mugardos al que se interceptó en el área de Pontedeume, alegando que se había desplazado hasta allí –a once kilómetros de su domicilio– para comprar tabaco. El segundo infractor, relató la Guardia Civil, fue un habitante de la villa eumesa al que se descubrió en el parque de As Fragas do Eume, a siete kilómetros de su casa paseando a su perro.
“Operación Balmis”
Por otra parte, la Armada comenzó a desplegar por Ferrol efectivos del Tercio Norte como parte de la “Operación Balmis”, que busca colaborar con efectivos y material con el Gobierno local de diversos municipios españoles.
En la ciudad naval pudo apreciarse la presencia de estos profesionales en zonas consideradas como “infraestructuras críticas”, como la estación de tren.