Antón Bruquetas presidente de The Camp doniños
El Raz Surf Camp, situado en la playa de Razo, fue el precursor de los campamentos de surf en España. Desde su fundación, a principios de la década de los noventa, otros han seguido su estela, perfeccionando un concepto que en Galicia se ha afianzado gracias al Art Surf Camp, ubicado en el mismo arenal del concello de Carballo, y, más recientemente, por medio de The Camp Doniños.
La pasión de cuatro amantes del surf fue el detonante para que la idea de dotar a Ferrol de una empresa de estas características, en principio un poco utópica, se convirtiese en realidad. No solo se trataba de transmitir ese gusto por el mar y las olas, sino de hacerlo de una forma profesional y poniendo a disposición de los surfistas y clientes que en ellos confiaran todos los medios posibles.
“Siempre pensamos que todas las iniciativas que surjan de este deporte debían profesionalizarse”, explica Antón Bruquetas, su presidente. Y con esa premisa comenzaron a trabajar en un proyecto en el que pretendían aunar una parte meramente deportiva, de formación, y otra turística.
The Camp Doniños se gestó hace cuatro años, cuando la crisis económica era ya una realidad y emprender una tarea se reservaba a valientes. Conocer el mundo del surf desde dentro les ha ayudado a afianzarse pero, sobre todo, la seriedad que pretenden que rodeen todos los aspectos que se derivan de su proyecto. Y lo cierto es que, desde su fundación, no ha hecho más que crecer, aumentando sus huéspedes, mejorando las instalaciones y ampliando sus oferta. Por eso, Antón Bruquetas es tajante: “El balance es satisfactorio, aunque es cierto que siempre hay cosas que se pueden mejorar”. n