El comité de empresa de Navantia Ferrol ha sido contundente en su respuesta ante la polémica de un supuesto desvío de carga de trabajo desde los astilleros de San Fernando y la Bahía de Cádiz a las factorías de la ría, calificando de “falsas” dichas informaciones. Por medio de un comunicado, tres de los cinco sindicatos que componen el organismo –CCOO, CIG y MAS– negaron que exista una “desproporción” en el área frente a otros centros de trabajo de la compañía, denunciando que, “cos datos reais”, las instalaciones ferrolanas se encuentran “por debaixo” de lo que les correspondería no solo en relación a proyectos constructivos, sino también a inversiones e incorporaciones.
En este sentido, la parte social apuntó que la propia Navantia negó que parte del polémico contrato británico Fleet Solid Support, que se desarrollará entre las plantas de Harland & Wolff –ahora incorporada al grupo naval español– y las gaditanas vaya a trasladarse a Ferrol, aun cuando son barcos de gran porte, más adecuados para los astilleros gallegos. Asimismo, también rechazó que uno de los dos Buques de Acción Marítima (BAM) para la Armada vaya a hacerse en la ría, entre otros motivos porque se trata de un contrato que aún no se ha firmado y que, por ello, se desconoce dónde se acometerá.
Respecto a las incorporaciones, el comité ferrolano recordó que en el área solo se han dado las contempladas en el antiguo plan industrial y con un retraso de dos años, en contraposición a las de Cádiz, que “van por enriba” del 75%, en parte, afirman, gracias a “proxectos europeos”, entre otros.
Por último, en lo relativo a las inversiones, la parte social apuntó que se prevén unos 229 millones de euros para las plantas de Ferrol y Fene frente a los 238 de las factorías gaditanas. En relación a esto, la CIG y MAS volvieron a reclamar el demandado dique cubierto –comprometido hace aproximadamente un mes tras años solicitándolo–, instando a la Dirección a que comience a trabajar en el estudio medioambiental y en la licitación de la redacción del proyecto.
Por otra parte, el sindicato CIG denunció esta semana la falta de avances en la negociación del nuevo convenio colectivo de la compañía después de que el anterior preacuerdo fuese rechazado en diciembre por las plantillas de Cartagena, San Fernando y Puerto Real.
Por medio de un comunicado, la central nacionalista detalló que los representantes de Murcia no acudieron a la última reunión de la comisión negociadora, solidarizándose con la situación que se está viviendo en las instalaciones pero, al mismo tiempo, criticando que no compatibilizasen las propuestas con su presencia en la mesa. En este sentido, el sindicato hizo parcialmente responsable de esta coyuntura a la Dirección de la compañía.
En este sentido, la CIG trasladó que se le dio “un ultimato” al presidente de la empresa “para que poña todo enriba da mesa”, afeando que siga presentando las mismas condiciones que un año atrás. No obstante, relata el sindicato, “no último momento” se recogieron algunas de las reivindicaciones de la parte social, tales como nuevas incorporaciones, promociones internas o la homogeneización “de variables e saídas”. De este modo, la central avanzó que las próximas dos semanas se mantendrán otras tantas reuniones telemáticas.