El electrocardiograma dio sus primeros pasos a mediados del siglo XIX y a día de hoy sigue siendo una prueba diagnóstica básica para detectar enfermedades del corazón. El cardiólogo del CHUF Emiliano Fernández-Obanza, y la enfermera de la UCI de Cardiología del hospital de Vigo María Blanco publicaron una guía básica para que profesionales de distintos niveles, tanto médicos como enfermeras, tuviesen las nociones suficientes como para intrepretar lo que reflejan los electros. “Electrocardiografía Básica.
Aproximación práctica a la lectura del EKG” fue la primera publicación de esta temática realizada por profesionales gallegos. Parte de los beneficios de su primera edición ya fueron en su día destinados a la Cocina Económica. Ayer se hizo oficial el donativo de parte de los beneficios de la segunda (la tercera está también a la venta). La entidad que preside Antonio Tostado recibió otros 3.100 euros de manos de los profesionales sanitarios.
“Es prácticamente la primera prueba que se realiza para el diagnóstico y seguimiento de las patologías cardíacas”, apuntaba Fernández-Obanza respecto del contenido de este manual de referencia. “Existen electrocardiogramas en todos los ámbitos de la sanidad, centros de salud, urgencias hospitalarias, unidades de hospitalización, consultas externas... y se realizan cientos de pruebas en un solo día”, añade. “Disponer de un estudio tan eficaz y accesible es una suerte; comprender la información que proporciona constituye una oportunidad para mejorar la calidad de nuestra contribución a la salud”. Por eso esta obra, que parte de la explicación de los principios anatómicos y pasa por la interpretación del electrocardiograma hasta llegar a las patologías, supone una aportación "a la formación y a la capacitación de nuestros profesionales".