El presidente de la Xunta, Alberto Núñez Feijóo, defendió su trayectoria al frente del Ejecutivo autonómico durante los últimos diez años y advirtió a la oposición de que puede seguir en el Parlamento gallego “más tiempo” del que pronostican sus rivales.

Durante la sesión de control de la Cámara gallega, el PSdeG exigió un balance de los tres mandatos de los populares al frente de la Xunta, ante lo que Alberto Núñez Feijóo apuntó que “después de tres mayorías absolutas consecutivas, los primeros ocho años ya tienen balance, el balance inapelable de los gallegos en las urnas y –recordó– ahora queda todavía el balance que los gallegos van a hacer en el año 2020”.

“Remitámonos al balance de los gallegos en el año 20 mientras usted y yo discrepamos cordialmente”, subrayó Feijóo en respuesta al portavoz parlamentario de los socialistas en O Hórreo, a quien le espetó que “vamos a seguir viéndonos en el Parlamento, a lo mejor, más tiempo del que usted se cree”.

“Yonqui del poder”
El presidente de la Xunta abrió así y de manera velada la posibilidad de presentarse como candidato a la presidencia del Gobierno gallego en las autonómicas de 2020 durante una sesión parlamentaria que fue especialmente tensa cuando la líder del BNG, Ana Pontón, le acusó de ser un “yonqui del poder”. La nacionalista insistió durante su intervención en la idea de que el jefe del Ejecutivo gallego es un “yonqui del poder”, pue

sto que estaría “dispuesto a hacer cualquier cosa” para mantener sus cuotas de mando.
Al hilo de esta observación, pidió explicaciones a Feijóo por “hacer alcalde” de Ourense a Gonzalo Pérez Jácome de quien, no hace tanto, dijo que “sería letal para la ciudad”.

“Espectáculo bochornoso”
La realidad, argumentó Pontón, es que Jácome “es alcalde de Ourense por obra y gracia de los votos del PP”, hecho que a su juicio es un espectáculo bochornoso”, pero que tiene una “lectura política más importante y es que deja desnudo al presidente de la Xunta porque nos demuestra que su palabra no vale nada”.

Para Pontón, el presidente de la Xunta ha demostrado que carece de “principios y ética” y solo busca “aferrarse al poder cueste lo que cueste”.

No obstante, la portavoz del Bloque aventuró que estos movimientos electorales traerán consecuencias para el Partido Popular en Galicia, ya que si ahora se convocasen las elecciones autonómicas, “los gallegos le pondrían las maletas en la puerta”.

En términos similares, Fernández Leiceaga hizo un repaso por los diez años del presidente de la Xunta en San Caetano con datos pésimos en los que se refiere a “familias, jóvenes, innovación y territorio”, por lo que espera que pese a que todavía resta “más de un año” para concluir el mandato, ese tiempo sea el último que le queda a Feijóo como presidente.

Ante ese eventual fin de ciclo que augura el portavoz socialista, le cuestionó al mandatario autonómico “qué pretende dejar a Galicia como legado”, ya que desde hace diez años “Galicia es cada vez más pequeña en términos democráticos”.

“Pufo”
“Necesitamos un cambio de paradigma, no una inyección de marketing”, aseveró Leiceaga, que invitó a Feijóo a hacer más como el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, que ha tomado decisiones que su antecesor en la Moncloa no había adoptado para mejorar la situación del país. Convite que el presidente de la Xunta declinó al considerar que los socialistas cuando gobiernan faltan el “respeto” a los gallegos, dijo aludiendo al “pufo” que, a su parecer, mantiene Pedro Sánchez con la comunidad, al deber “700 millones de euros” correspondientes a las cuantías pendientes de las entregas a cuenta, la devolución del IVA o las liquidaciones negativas.

Entre el rosario de críticas que el socialista lanzó al presidente de la Xunta, destacó la situación de crisis demográfica que atraviesa la comunidad gallega, ante lo que Feijóo se defendió subrayado que esa es una problemática que lleva cuarenta años, por lo que no se puede responsabilizar a la Xunta.
Ironizó así con el hecho de que parece que desde el PSdeG se pretende responsabilizar al actual presidente de un problema que viene de lejos; “cuando Feijóo estaba en la primaria la culpa ya la tenía él, yo estaba estudiando en Os Peares y ya empezaba a tener la culpa”, bromeó, al tiempo que incidió en que Galicia ha alcanzado el “mejor saldo migratorio de la última década”.