Los jugadores del Racing comienzan hoy a preparar el encuentro que el domingo por la mañana van a disputar en el feudo del Ibiza, con la intención de conseguir los primeros puntos de la temporada en campo contrario.
Después del empate del pasado domingo ante el filial sportinguista, los integrantes de la plantilla racinguista quieren sacar una visión optimista, en cuanto a que cuando no seas capaz de ganar, por lo menos no perder y, además, han dejado, por primera vez en lo que va de temporada, la portería a cero, a pesar de que su rival dispuso de varias ocasiones claras para marcar.
Lo que tampoco quieren los futbolistas del cuadro verde es poner disculpas por el desplazamiento que tendrán que realizar a tierras baleares y que les obligará a llevar a cabo un “madrugón” el sábado por la mañana, ni porque su adversario disponga de un terreno de juego artificial.
En el vestuario son conscientes de que con la media de puntos que están logrando esta temporada no llega, y que hay que cambiar esa dinámica en feudo contrario. Sobre ello, el defensa Quique Fornos reconoce que “tenemos que hacer algo distinto, porque no fuimos capaces de marcar en dos partidos y hemos encajado cuatro”.
Por su parte, el entrenador, Emilio Larraz, ya comentaba antes del encuentro ante el Sporting B que el objetivo que se marcan es tratar de ser más regulares y que no dependan solo de los resultados de A Malata, en la que ya han dejado escapar cuatro puntos.
Por ello, es importante empezar a sumar como visitantes, aunque en esta ocasión van a visitar uno de los feudos más complicados de la categoría, ya no solo porque el partido se juega sobre un césped artificial, sino porque el rival cuenta con una plantilla con jugadores destacados.
Durante esta semana, tendrán que preparar bien el encuentro para intentar hacer daño al contrincante y, sobre todo, para estar más acertados en ataque. l