Sanidad dividió a la población española en 15 grupos que se irán vacunando contra el coronavirus en tres fases -las dos primeras entre enero y junio, y la tercera durante el verano- y explicó que esta clasificación se hace atendiendo al riesgo de morbilidad grave, exposición al virus, impacto socioeconómico y posibilidad de transmisión.
El primer grupo, el único que está detallado y afecta a unos 2,5 millones de personas, incluye a residentes y personal sanitario y sociosanitario de residencias de mayores y con discapacidad, el resto del personal sanitario y grandes dependientes no institucionalizados, explicó el ministro de Sanidad, Salvador Illa, en rueda de prensa para informar sobre la estrategia de vacunación.
Illa señaló que los 15 grupos evaluados por el equipo técnico, además de los ya citados, son: personas con condiciones de riesgo alto pero también medio o bajo, personas que viven o trabajan en comunidades o entornos cerrados, poblaciones vulnerables por su situación económica, personas con trabajos esenciales, toda la población docente y toda la población infantil, adolescente y joven mayores de 16 años.
Además, se incluye al conjunto de la población adulta, la que está en áreas susceptibles de reincidencia o en situaciones de posibles brotes, embarazadas y madres que proporcionan lactancia natural y población seropositiva a SARS-CoV-2.
De esta forma, explicó que el primer grupo se vacunará entre el mes de enero y primeros de marzo, el segundo grupo (que aún está por identificar qué colectivos lo integran) se inmunizará entre marzo y primeros de junio y el tercero en los meses de verano.
En definitiva, Illa subrayó que esta clasificación “cubre a toda la población española” y será en las etapas dos y tres cuando los técnicos, conformen vayan teniendo datos sobre la disponibilidad de las vacunas, establezcan quienes son los grupos prioritarios.
El ministro explicó que esta estrategia se irá actualizando pero siempre con “la meta” de reducir la mortalidad “con eficacia” y protegiendo a los más vulnerables y evitando hospitalizaciones.
Illa informó de que la estrategia hecha por el grupo técnico de vacunas tiene las herramientas para vacunar a la población de manera “eficaz y eficiente, con criterios de equidad y la flexibilidad necesaria para adaptarse a las diferentes etapas”.
El titular de Sanidad también reiteró que las vacunas que reciban la autorización de la Agencia Europea de Medicamentos gozarán “de toda la seguridad y si no tienen garantías suficientes, no van a recibir autorización para ser administradas”.
En esta línea, insistió en que conforme a los contratos ya firmados, España adquirirá 140 millones de dosis para inmunizar a 80 millones habitantes. Por tanto, subrayó, “habrá vacunas para proporcionar a todos los ciudadanos y para ejercer las tareas de solidaridad” con otros países.
Sobre las advertencias de la Sociedad Española de Geriatría, que alertaba de que no existen suficientes evidencias de la eficacia de las vacunas en la población anciana, Illa reiteró que no se va a administrar ninguna vacuna que no cuente con los necesarios requisitos de seguridad ni en personas mayores, ni en jóvenes.
El ministro de Sanidad dijo confiar en que la respuesta de la población a la vacuna va a ser “muy positiva” y auguró una vacunación “masiva” debido a que España es tradicionalmente un país muy receptivo y porque la experiencia de este año con la gripe arrojó un incremento de un 40% en las tasas de inmunización.
Asimismo, reiteró que la vacuna será voluntaria y, de momento, no se planteó establecer el requisito de vacunación para realizar determinadas actividades.