Los laboristas condicionan su apoyo al plan de May a que sea sometido a un referéndum

Los laboristas condicionan su apoyo al plan de May a que sea sometido a un referéndum

El Partido Laborista británico estudia presentar una enmienda al acuerdo del Brexit pactado con Bruselas por el Gobierno de Theresa May que condicionaría su aprobación a que fuera sometido a votación en un segundo referéndum.


La cúpula de la formación opositora, liderada por Jeremy Corbyn, se plantea respaldar a nivel oficial una enmienda preparada por los diputados Peter Kyle y Phil Wilson que “suspende el apoyo” de la Cámara al acuerdo de May hasta que se celebre un nuevo plebiscito.


Esta enmienda se tramitaría en la próxima votación del tratado gubernamental en la Cámara de los Comunes, el 12 de marzo, aunque la fecha puede cambiar según el progreso de la negociación del Gobierno con Bruselas.


De ser aprobada, lo que requeriría el apoyo de diputados conservadores, los laboristas se abstendrían en la votación del tratado negociado por la primera ministra con la Unión Europea para la salida del Reino Unido de este bloque, facilitando así su aprobación, con la condición de que se sometiera a la opinión pública, junto con otras opciones, en un plebiscito.

Los británicos votaron a favor de salir de la UE en un referéndum en junio de 2016.
Calendario del proceso 


La primera ministra británica, Theresa May, se ha comprometido a presentar ante los Comunes para el 12 de marzo un pacto de salida de la UE mejorado, después de que el original fuera rechazado el pasado 15 de enero.


Si para ese día no ha logrado de Bruselas las concesiones que desea, la líder conservadora prevé impulsar mociones para que los diputados se pronuncien primero, el 13 de marzo, sobre si descartan una salida sin pacto, y, si esto prospera, el 14 de marzo sobre si prefieren retrasar la fecha de salida del bloque, fijada en el 29 de marzo próximo.


Por presiones internas y tras la marcha de varios diputados, el Partido Laborista anunció esta semana que apoyará oficialmente la celebración de un segundo referéndum del Brexit”, después del celebrado en 2016.
No obstante, la dirección del partido insiste en que continuará trabajando también para lograr otros desenlaces, como la celebración de unas hipotéticas elecciones generales.

Los laboristas condicionan su apoyo al plan de May a que sea sometido a un referéndum

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