Víctor Senra e Iago Caamaño protagonizaron en la jornada de ayer el mano a mano más intenso del Rally de Narón en sus últimas ediciones. Una alternancia en la primera posición que se tradujo en que menos de dos segundos fueron los que separaron al ganador Senra de su pertinaz perseguidor, Caamaño.
Todo ello decidiéndose en un último tramo en el que el deportista de la Escudería Yacar Racing iniciaba con una exigua diferencia de 0.894 estos últimos kilómetros de la trigésimo primera edición de la carrera naronesa. Con su Ford Fiesta R5, el, a la postre, campeón se despidió con un nuevo “scratch” en el trazado de Vilachave, decisivo en la composición del podio. Un mejor tiempo que se unía a los otro cuatro con los que el piloto de Dumbría terminaba su actuación sobre el recorrido de la carrera naronesa, por tres de su adversario Caamaño en una calurosa jornada la de ayer.
Y es que en esta trigésimo primera edición, las altas temperaturas volvieron a hacer acto de presencia al igual que hace doce meses, lo cual pasó factura a muchos de los pilotos y copilotos, así como a sus vehículos, convirtiendo esta carrera en “muy dura, el calor, los tramos...” comentaba el local Jorge Cagiao una vez finalizada una cita en la que se hizo con el entorchado en la competición de Volante FGA junto con su copiloto Amelia Blanco, logrando además la octava posición en la clasificación general. Una opinión que también compartía otro de los deportistas de la comarca que en la jornada de ayer entraron en liza, Rubén Gandoy, y que asimismo terminó su actuación en el podio naronés. “La verdad es que hacía mucho calor, no se daba casi ni conducido”, añadía el deportista local tras una carrera en la que más de 240 voluntarios facilitaron la realizaron de esta cita organizada por el Siroco Narón.
Un “sacrificio” recompensado por un final de vértigo entre Senra y Caamaño que este último definió como “muy emocionante, con una microscópica diferencia”. Y tanto. Ya que este piloto intentó por todos los medios recortar el menos de un segundo que lo separaba de su adversario, si bien Senra supo mantener la cabeza fría para anotarse de nuevo el triunfo en la competición naronesa a la que parece tener cogida la medida.
Y eso que, en esta edición, y con los condicionantes meteorológicos anteriormente citados, algunas de las palabras más usadas por los participantes fueron las de calor, complicado, roto y sucio, para referirse a la carrera. Alicientes que aliñaron todavía más si cabe las ganas de los pilotos por poder cruzar la línea de meta. l