La Policía Nacional desarticuló recientemente una red criminal de tráfico de cannabis y drogas de diseño que operaba principalmente en Ferrol, A Coruña, Lugo y Avilés, Asturias, y que era dirigida desde Madrid.
Según informaron ayer los Cuerpos de Seguridad del Estado, la operación dio comienzo tras la detención en la plaza de España de Ferrol de “una conocida distribuidora de sustancias estupefacientes” el pasado 25 de octubre. Dicha aprehensión llevó a los agentes a localizar al suministrador de la mujer, un joven “asentado en la barrio de Recimil”, en cuya vivienda fueron identificados “además de otros clientes, a sus suministradores en uno de los procesos de abastecimiento observados”.
Así, a raíz de esta detención fueron señalados otros puntos de distribución en A Coruña, Lugo y Avilés, cada uno de ellos con su propia red de proveedores compuestas por “grupos de jóvenes” que movían las drogas “en sus zonas de influencia y principalmente a otros jóvenes”.
Del mismo modo, estudiando la propia estructura de la organización se logró determinar que los líderes de la misma residían en Madrid, ofreciendo instrucciones de las operaciones a una distancia segura. Afortunadamente, dichos cabecillas fueron a su vez identificados, siendo seis de ellos ingresados en prisión de forma preventiva.
De esta forma, la Policía Nacional logró detectar un operativo para transportar drogas de Madrid a Lugo para su posterior venta por toda Galicia. Los traficantes, detallan los agentes, viajaban en dos vehículos, siendo el primero de vigilancia y el segundo de transporte.
En total, fueron aprehendidos más de 60 kilogramos de hachís, cuatro de cogollos de mariguana, un millar de dósis de MDMA y 60 de Speed.