Hay ganas de ver películas. La Fiesta del Cine, del 21 al 23 de octubre, con importantes descuentos sobre las entradas normales en todo el país, fue el primer y exitoso ensayo de lo que desde enero son los Miércoles al Cine. Ese día de la semana, y hasta mediados de abril, se pueden encontrar las localidades incluso a mitad de precio. Y así, los que habían desertado de las salas vuelven y otros que conocen la cartelera a través del sofá y de internet, se aficionan a la experiencia única de ver un filme en la pantalla grande. Los dos cines de Ferrolterra, el Dúplex (en Esteiro) y los Odeón (en el centro comercial de A Gándara) forman parte de esta iniciativa estatal y hacen un balance muy bueno de cómo funciona.
“La respuesta del público está siendo espectacular”, explica Constantino Sambade, de los Odeón Multicines (cadena con salas además en León, Girona y Cuenca). “Notamos mucha más afluencia que los miércoles anteriores a esta promoción. Se multiplicaron por diez los espectadores. Ahora los miércoles hay más gente que los viernes y se equiparan e incluso superamos, la de los sábados”, explica. Con este éxito “estamos muy interesados en poder continuar más allá del 15 de abril. Lo consideramos muy importante para que la gente no pierda la costumbre de ir al cine, que era lo que estaba pasando. Pones películas poco atractivas y a precios muy elevados y no vienen. La conclusión que sacamos es que muchos espectadores, si les pones precios baratos y la película tiene cierto interés, hacen el esfuerzo de ir al cine aunque sea un día de semana, después de trabajar”, añade.
Juan Antonio Álvarez, de los Dúplex, los únicos cines que quedan en el término municipal de Ferrol, también ha detectado un incremento de espectadores los miércoles. “Tenemos casi tres veces más recaudación”, comenta. Aunque en algunos casos es gente que por ir el miércoles, con la oferta, deja de ir otro día de la semana, “al final el cómputo general aumenta”. También está interesado en prolongar esta promoción. “La mayor parte de la gente te dirá que no va al cine porque es muy caro y porque es más cómodo bajárselo de internet, pero si es más barato tenemos más afluencia, y aunque luego hay que mirar el rendimiento para que salgan las cuentas, lo que prima es que los espectadores vengan”.
decisiones impuestas
La crítica común en ambos es que no tienen libertad para poner los precios que deseen, algo que ha pasado incluso con esta promoción, impulsada desde la Federación de Cines de España. En Odeón se ha bajado el precio de la entrada de 8 euros a los 3,90 que se cobran los miércoles. En el Dúplex se quería pasar de 5,50 a 1,90 “pero las distribuidoras no lo aceptan y, aunque en el momento de informarnos de la promoción no nos lo dijeron, se acordó un precio mínimo de 3 euros”. Las cifras habituales de venta vienen fijadas porque los estudios de Hollywood pueden quedarse hasta con un 60% de la entrada, como se ha denunciado a raíz de la polémica con el estreno de “El lobo de Wall Street”, de Martin Scorsese, que las salas vinculadas a Cinesa y a Kinépolis se negaron a proyectar.
Polémicas aparte, el bajón de espectadores de los últimos años parece haberse estabilizado. “Siguieron bajando en 2013”, apunta Constantino Sambade, “pero de manera menos acusada. Lo primero que demandan los espectadores es que traigamos películas con temas y argumentos interesantes, porque cuando es así, pagan por la entrada”.
“Nosostros nos mantenemos”, explica Juan Antonio Álvarez. “Hemos invertido en un proyector digital para una de las salas y también hemos mejorado la oferta de películas de estreno”.