El Partido Conservador del primer ministro británico, David Cameron, es la formación con el mayor número de escaños, 316, seguido del Laborista, con 239 asientos, según una encuesta a pie de urna de la cadena BBC.

El Partido Nacionalista Escocés (SNP) obtendría 58 de los 59 escaños reservados en la Cámara de los Comunes para Escocia.

La formación independentista que lidera Nicola Sturgeon prácticamente borraría del mapa político en Escocia a los laboristas, que la pasada legislatura obtuvieron 41 escaños en la región autónoma.

Sin los asientos escoceses, el Partido Laborista de Ed Miliband sumaría 239 escaños, según la misma encuesta, por lo que le resultaría difícil formar una mayoría parlamentaria ante los 316 diputados que obtendría el Partido Conservador.

Por su parte, el Partido de la Independencia del Reino Unido (UKIP), obtiene solo dos diputados. Pese a que las encuestas preelectorales le daban entre un 14 y un 12 por ciento de apoyos, el partido eurófobo se quedaría solo con dos escaños en la Cámara de los Comunes, según el sondeo. En la actualidad el partido de Nigel Farage tiene dos diputados en el parlamento británico, ambos procedentes de las filas del Partido Conservador que no fueron elegidos directamente por el UKIP.

recuento

Los colegios electorales cerraron ayer en el Reino Unido a las 22.00 hora local y comenzó el recuento de papeletas en uno de los comicios más inciertos de las últimas décadas en el país.

Los primeros resultados comenzaron a conocerse alrededor de la medianoche, si bien el desenlace definitivo no quedará establecido hasta hoy al mediodía debido al complejo sistema electoral británico, que divide el recuento en 650 circunscripciones.

Todas las encuestas previas a la apertura de las urnas pronosticaban un resultado ajustado entre los dos partidos mayoritarios, Conservadores y Laboristas, por lo que se esperaba que a partir de la pasada madrugada se abriese un periodo de negociaciones para formar Gobierno.

Ese diálogo estaría marcado por la irrupción en el panorama político de partidos minoritarios como el Partido Nacionalista Escocés (SNP), que aspiraba a llevarse gran parte de los asientos reservados para Escocia en la Cámara de los Comunes y podría ser la llave para que el líder laborista, Ed Miliband, acceda a Downing Street.