Más de un centenar de personas se dieron cita ayer delante de la capilla de la Orden Tercera para ser testigos del renombramiento de la glorieta anexa en honor a Alfredo Martín. Siete meses después de la muerte del polifacético artista y tras la aprobación en pleno de la petición popular iniciada en Change.org, familiares y amigos pudieron constatar cómo el nombre de Martín quedará para siempre al lado de su venerado templo.
“Fue una especie de centro social y casi su primer hogar”, destacó uno de los hijos de Alfredo Martín que comparte además su nombre, al tiempo que señaló que su padre “no era un maestro en lo académico, pero a través de su ejercicio artístico fue atrayendo a cientos y cientos de jóvenes, sacándolos de situaciones difíciles, dándoles esperanza y una serie de valores”.
Precisamente, Luis Lorenzo, en representación de la iniciativa popular, habló sobre la labor humana y social que desempeñó el ferrolano a lo largo de su vida “enseñando, cuidando y velando por tantos jóvenes que aprendieron a su lado cómo comportarse en la vida; con él aprendimos carpintería, fontanería, electricidad, a tocar y reparar instrumentos, a trabajar en equipo, a compartir, e entender el valor del esfuerzo... A su lado nadie estorbaba, no importaba la clase social ni la ideológica, ni las carencias, el nivel de formación, las minusvalías o enfermedades, todos eran familia”, aseguró Lorenzo, destacando además la “humildad franciscana” de Martín que lo convirtió en un modelo a seguir por muchas generaciones.
El alcalde de la ciudad, Jorge Suárez, y el concejal de Cultura, Suso Basterrechea, también quisieron destacar su faceta social “para buscar unha vía onde toda a mocidade poidera refuxiarse ante a pantasma das drogas que inundaba moitos barrios”, indicó el regidor local. El edil de Cultura indicó que ya en el entierro de Alfredo Martín fueron muchos los que le reclamaron lo que ayer fue una realidad, por lo que “este é un dos actos máis xustos que pode darse desde o conxunto da cidadanía e aínda que ninguén pode suplir a ausencia de don Alfredo, polo menos ser un pobo agradecido”, aseguró Basterrechea.
En un acto en el que la emoción fue la protagonista constante, la banda Acotaga, acompañada de integrantes de la Banda de Granaderos fundada por el homenajeado, puso la nota musical con interpretaciones como “Sainza” o la “Marcha do Antigo Reino de Galicia”.
Un padre compartido
Su viuda, Mercedes García, y sus hijos, Alfredo y Ana, quisieron agradecer de manera reiterada tanto el gesto de renombrar la glorieta como la gran asistencia al acto.
“Veo pajes, Reyes Magos, figuras, cofrades, terciarios franciscanos y granaderos... es emocionante ver a tanta gente que ha querido venir hoy aquí a dar este homenaje a un hombre bueno, que nunca buscó más que ayudar a los demás en la medida de lo posible”, comentó en su discurso Alfredo Martín hijo. A su vez, éste se refirió a muchos de los presentes asegurando que su padre “fue para muchos de vosotros también un padre y quiero que sepáis que para él también fuisteis sus hijos y que, hasta el último momento, siempre tenía en su recuerdo a los granaderos y a todos los colaboradores que estuvieron con él y estoy seguro de que ahora os está mirando con esa sonrisa medio socarrona medio bondadosa dándoos las gracias”, manifestó.