La protectora de animales Cometa hace un llamamiento a la solidaridad ciudadana para la adopción de mascotas. La asociación se encuentra desbordada por encima del 100% de ocupación, tal y como reconoce Iria Saavedra, miembro de la junta directiva. La entidad tiene actualmente acogidos en su refugio, ubicado en la parroquia de Doso, a 38 perros, entre los que se encuentra una camada de once cachorros. “Las adopciones están siendo mínimas porque se trata de perros de gran tamaño, mestizos de pastor alemán que son más difíciles de colocar”, explican.
Una situación que podría agravarse el próximo mes coincidiendo con el final de la temporada de caza. “En los últimos años registramos mucho abandono de perro de caza, porque ya no les son efectivos al cazador que opta ya por no ponerles el microchip y sin él ya no los reclama nadie”, indica la responsable.
gatos
A este volumen de perros se suman también otra treintena de gatos. En este caso, los miembros de la protectora los tienen en sus propias casas o casas de acogida. También este año han visto incrementado la presencia de felinos en las calles. Una situación que no tiene tanto que ver con el abandono como con la proliferación de gatos callejeros sin esterilizar. “A estas alturas del invierno ya no debería haber gatos en las calles, sin embargo por el buen tiempo que hizo hasta escasas semanas sigue habiéndolos”, explica Iria Saavedra.
La asociación, que fundó su refugio en 2012, no solo se ve desbordada por la cantidad de animales de los que hacerse cargo, sino también por la falta de voluntarios que colaboren en las tareas de mantenimiento y cuidado de las mascotas.
“Desgraciadamente el abandono no está penado y las cosas se nos están poniendo complicadas para la protectora”, explica.
Es por ello que hacen un llamamiento a la colaboración ciudadana y a la adopción responsable. “Es el posible adoptante el que se pone en contacto con nosotros y viene a visitar el refugio para escoger al perro que quiere. Nosotros le enviamos luego por correo un test y si todo va bien, nos desplazamos al que será el hogar del perro para valorarlo”, según indica la responsable.
La entidad realiza un seguimiento posterior de cada caso y obliga en el plazo de seis meses al dueño a esterilizar al animal, en caso de que no se trate de un ejemplar adulto que saldrá esterilizado del refugio. A pesar de todo el proceso, “seguimos teniendo devoluciones”, explica.
Cometa trabaja también con un educador canino al que sugieren acudir a los nuevos dueños con sus mascotas para tratar determinados problemas conductuales. “La gente firma una cláusula comprometiéndose a hacerse cargo del animal pero las vidas les cambian y en la mayoría de los casos, cuando esto sucede, acaban devolviéndolos”.
Cometa firmó el pasado año 124 adopciones. Desde la apertura del refugio en 2012, batieron récords en 2014 con 160 adopciones. “Las cifras van variando pero nunca hemos bajado del centenar”, una cifra que también esperan alcanzar este 2017.