Cuando el trabajo y la afición se unen en un mismo espacio

Estudió Artes Gráficas pero nunca llegó a ejercer de ello, por lo que decidió estudiar auxiliar de enfermería y relegar la fotografía al apartado del ocio. “Cuando era joven, el diseño era lo que más me apetecía, pero aquí estaba complicado porque no es igual que si vives en Madrid o Barcelona donde ya hay otras opciones. También cambió muchísimo la tecnología; me puedo reír de las máquinas en las que yo hice prácticas. Así que como también me gustaba mucho lo de enfermería, hice por libre lo de auxiliar que me dejaba ratos libres, porque yo de estar quita tampoco soy mucho”, explica riéndose Elena Bouza, trabajadora de la Residencia Mixta de Maiores de Caranza que estos días expone su primera muestra de fotografía en solitario en el centro gestionado por la Xunta.

Bajo el título “Contemplando as cores da natureza”, Bouza seleccionó un total de quince instantáneas que se encuentran disponibles al público hasta el próximo 21 de junio en la planta cero de la residencia. “Hice un poco en exposición lenta con cascadas, una o dos puestas de sol y animales como mariposas y pájaros. Estos son los que más les gustan a los residentes porque me dicen ‘este xa non o hai agora’ y se fijan más”, destaca la aresana

Esta exposición representa la primera de fotografía que se muestra en el centro y si hay alguien que animó a Elena Bouza a dar el paso esas fueron sus compañeras, junto con el equipo directivo que se encargó del montaje. “Al verme las fotos en el Facebook siempre me decían que por qué no exponía y se corrió la voz y entonces la dirección me dijo que, aprovechando el Día del Libro y el 42 aniversario del centro, de hacerla”, explica. 

Se trata de la primera vez que expone su trabajo en solitario, ya que en anteriores ocasiones mostró sus obras en el casino de Ares, en el Monasterio de Santa Catalina o con sus compañeros de los cursos que realizó en la UDC. “Por un lado pienso, esto es un atrevimiento. No es igual que hacer una en colectivo que metes tres o cuatro por el medio y que no se van a ver porque hay tantas y buenas... En esta tenía un poco más de vergüenza... Pero luego llegas a una edad que te da igual”, dice riéndose la auxiliar de enfermería, que añade que si se lo pidiesen para otro sitio seguramente habría dicho que no, “pero aquí es como estar en el salón de mi casa”.

Falsas pinturas 
Una de las cosas que más le llamó la atención a Elena Bouza cuando inauguró la muestra es que todos sus compañeros se acercaban mucho a las imágenes. “Se pensaron en un principio que eran pinturas y no sé por qué, lo único que se varió en comparación con las otras exposiciones es que las fotos aquí las hice en mate y no en brillo...”, comenta.

Se jubila el próximo 26 de agosto, tras más de 20 años desde el día que entró por la puerta de la Residencia Mixta de Maiores. Autodidacta y apasionada de las instantáneas nocturnas "porque son más divertidas y creativas" –forma parte de la Asociación Fotografía Ferrolterra–, Bouza anima también a sus compañeras a explotar el don que lleven dentro. “Hay gente que recita, que hace poesía, que pinta... aunque somos auxiliares de enfermería o camareras o lo que sea también sabemos hacer más cosas y yo siempre les digo que a ver cuándo se animan también”.