La vicepresidenta primera del Gobierno, Carmen Calvo, defendió retomar el diálogo en Cataluña a pesar de la actual coyuntura política, social y económica por la crisis del coronavirus, porque el problema “sigue ahí” y el Ejecutivo de Pedro Sánchez “no huye” de los problemas sino que “los afronta”.

En una entrevista, coincidiendo con el final del estado de alarma, Calvo remarca que lo fundamental ahora para el Gobierno es la reconstrucción social y económica y que preferiría estar centrado “solo en eso”, pero al mismo tiempo reconoce que “la principal obligación” de un político “es no perderle la cara a la realidad” aunque no le guste.

Calvo recordó que pese al paréntesis en el conflicto catalán que se ha vivido durante la pandemia y los tres meses de estado de alarma, el problema no ha desaparecido, las fuerzas políticas independentistas siguen gobernando en Cataluña y conservan un gran apoyo ciudadano.

Como ejemplo de que el problema “no ha desaparecido”, citó algunas manifestaciones de políticos independentistas en estos meses, asegurando que si Cataluña hubiera sido independiente no se habrían registrado fallecidos por coronavirus en la comunidad.

“Eso lo hemos oído, así que el problema sigue ahí”, destacó Calvo, que insistió en que el Gobierno no rehúye la realidad, sino que la afronta, a diferencia –dijo– del anterior Gobierno de Mariano Rajoy.

Un PP que, indicó, se ha quedado con una representación mínima en Cataluña, reflejo de la opinión que genera entre los catalanes su falta de compromiso con la comunidad.

Prudencia y valor

“Al gobierno se le podrán criticar muchas cosas, pero que somos un Gobierno que afronta la realidad con prudencia y con valor, nadie se lo puede negar”, insistió la vicepresidenta, que se felicitó de que durante el mandato de Sánchez el Ejecutivo independentista catalán “no se haya saltado ni una sola norma”.

Con este escenario, la “número dos” del Gobierno apostó por retomar el diálogo con el Govern, incluso este próximo mes de julio como ha propuesto ERC, socio del Ejecutivo en el Congreso.

Una propuesta de diálogo inmediato que, sin embargo, ha sido rechazada por el presidente de la Generalitat, Quim Torra, que prefiere esperar. Mientras ERC y JxCat se ponen de acuerdo, Calvo abogó por dialogar con claridad y “sin trampas” aunque se parta de posiciones antagónicas

“Nosotros estamos esperando, por nosotros no hay ningún problema”, remarcó Calvo, que aguarda una respuesta de los dos partidos antes de fijar una fecha.

Elecciones

Por su parte, el primer secretario del PSC, Miquel Iceta, defendió ayer su candidatura a la presidencia de la Generalitat “para ofrecer un buen gobierno a Cataluña” y ser “un presidente que supere la década pérdida por culpa, por responsabilidad, de los gobiernos independentistas”.

Iceta intervino de forma telemática en el VII Congreso del PSC en el Barcelonés Nord, cónclave en el que aseguró que “los meses que vienen necesitan de grandes consensos, de unidad política, de estabilidad, de seguridad, de rumbo claro, y no de rumbo de colisión”. “Y el PSC –apostilló– está preparado con un proyecto integrador y solvente”. “El PSC es y será la principal fuerza de la izquierda en Cataluña", dijo. l