Pablo Alborán volvió a colgar este martes en Madrid el cartel de “entradas agotadas”, esta vez unas íntimas 1.700 en el Universal Music Festival, cita que llevó al cantante “por fin” al Teatro Real. El cantautor, acostumbrado a grandes escenarios, sintió más de cerca a sus fans en un espacio “mágico” en el en el que ha “cumplido un sueño”.