Hombre de confianza de Jaume Matas cuando este era presidente y amigo de Iñaki Urdangarin hasta 2007, José Luis “Pepote” Ballester cargó contra ambos en la primera jornada de declaraciones del juicio del caso “Nóos”, en la que el interrogatorio del exalto cargo del PP y medallista olímpico se prolongó durante más de cuatro horas.
Su comparecencia abrió así la ronda de declaraciones que se extenderán durante las próximas tres semanas, hasta el 26 de febrero, y lo hizo descargando en el exministro las instrucciones para adjudicar “a dedo” al Instituto “Nóos” presidido por Iñaki Urdangarin dos foros de turismo y deporte que, organizados en Palma en 2005 y 2006, acabaron costando 2,3 millones de euros a las arcas públicas.
manipular actas
A preguntas del fiscal Pedro Horrach, el director general de Deportes del Govern en la última legislatura de Matas (2003-2007) subrayó que era el exmandatario autonómico quien daba las “directrices” para “vestir el santo” y manipular las actas de la Fundación Illesport, uno de los órganos que contrató con el Instituto Nóos bajo el mandato del expresidente del PP.
De hecho, aseveró que la junta de patronos del Illesport se reunió una sola vez, “al principio de todo”, señalando que las actas de la fundación las firmaba y redactaba su gerente Gonzalo Bernal, también procesado en esta causa. El acusado recordó además que fue Matas quien le propuso para el cargo tras emplazarle la secretaria de aquél a una reunión en el Consolat.
“Nos conocíamos desde 1996, cuando gané la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Atlanta. Siendo ya ministro mantuvimos el contacto”, ha relatado.
El procesado ha ratificado tajante además que estuvo presente en un encuentro en el Palacio de Marivent, llevado a cabo en septiembre de 2003, en el que Urdangarin y Matas definieron su colaboración de cara a la puesta en marcha de futuros proyectos entre el Ejecutivo balear y el Instituto Nóos.
AMISTAD DESDE 1985
En cuanto a su relación con el exduque de Palma, recordó que le conoció en 1985 y fue posteriormente cuando Urdangarin le trasladó la posibilidad de que el Govern patrocinase el equipo ciclista Illes Balears-Banesto, además de poner en marcha una oficina para el seguimiento del mismo.
Más en concreto, Urdangarin, para quien la Fiscalía reclama 19 años y medio, propuso que el Govern contratase a la mercantil Nóos Consultoría Estratégica –una de las empresas que conformaban el entramado a través del cual tanto Urdangarin como su exsocio Diego Torres se habrían apoderado de los más de seis millones de euros– para llevar a cabo las tareas encomendadas a la oficina del proyecto ciclista.
“No hay más cera que la que arde”, llegó a expresarse el exdirector general al aseverar que en ningún momento nadie del Ejecutivo autonómico discutió el pago de 1,2 millones de euros a favor de Nóos por la celebración del Illes Balears Forum.