Los padres de Andrea, la niña de 12 años con una enfermedad neurodegenerativa irreversible, manifestaron que su hija “se ha ido en paz y con tranquilidad, sin sufrir”, y “como ella misma hubiese querido”.
Tras el fallecimiento de la menor al mediodía de ayer, en el Complexo Hospitalario Universitario de Santiago (Chus), la familia de Andrea emitió un comunicado, remitido a los medios de comunicación por el abogado, en el que muestra su pesar por la muerte de la menor, que había ingresado de urgencia el 9 de junio. “Su recuerdo vivirá para siempre en nuestros corazones”, aseguran.
Asimismo, trasladó “una última petición”, en la que expresan que quieren “despedir a Andrea en familia” y “en la más estricta intimidad”.
“Para nosotros Andrea, tal y como la conocíamos, comenzó a írsenos cuando ingresamos de urgencia el 9 de junio, fecha de la que ahora se cumplen cuatro meses, pero su recuerdo vivirá para siempre en nuestros corazones”, añade.
aún más duro
Los padres de la niña, Antonio Lago y Estela Ordóñez, han querido también agradecer el “apoyo de quienes en estos días tan difíciles habéis estado a nuestro lado”. “Sin vuestra ayuda, este final hubiera sido, sin duda, aún más duro”, dice el comunicado.
Su agradecimiento lo hicieron extensivo a los medios de comunicación, al juzgado, fiscalía, Instituto de Medicina Legal de Galicia, así como al personal del Chus. “A todos vosotros, en estos momentos de intenso dolor, nuestra más sincera gratitud”, apuntan.
respeto al duelo
“Agradeceríamos de antemano el respeto a nuestro duelo y que permitáis que este último adiós podamos realizarlo en la más estricta intimidad, en compañía de nuestros allegados y seres queridos”, piden los padres.
El cuerpo de la pequeña Andrea permanece en el depósito del Chus, desde donde previsiblemente hoy será trasladado a su localidad natal, Noia, donde será despedida en la “más estricta intimidad” por deseo de la familia. n