Aparatos creados con material ordinario y de bajo coste añadidos a los de media y alta fidelidad propios de la simulación han hecho de las aulas de la Xerencia Integrada de Ferrol todo un referente que ya ha sido expuesto en diversos congresos nacionales. La pasada semana los responsables de esta iniciativa hacían lo propio en el Human Patient Simulation Network, que se celebró en la Universidad Francisco de Vitoria, en Madrid.
En esta ocasión demostraron como la simulación en ámbitos como la laparoscopia puede ser posible con cajas de plástico, cámaras web y material biológico inerte simulando un aparato laparoscópico. También explicaron como la cirugía menor se puede practicar de forma cómoda y económica empleando gomas subcutáneas en piel que simulan vías y tórax de animal –carne de cerdo– para practicar actuaciones emulando lesiones reales. En esta ocasión, la novedad fue un taller de paracentesis –inyección para la extracción de líquido acumulado en el abdomen a causa de diversas patologías– para lo que se empleó carne de cerdo simulando un abdomen humano y bolsas de suero como si fuera líquido ascítico.
En total se presentaron en Madrid cinco talleres a cargo de los profesionales ferrolanos Ramón López, coordinador de las aulas de simulación; Francisco Rascado, responsable médico de las mismas; Pilar López-Sastre, enfermera de reanimación; Yésica López, facultativa de Urgencias; Abel Vázquez, médico de Urgencias; y Javier Abella, técnico de emergencias del 061.
Las aulas de Ferrol destacaron como proyecto integrador basado en la reutilización de recursos para la formación de nuevos residentes y para la práctica continuada de todo el personal sanitario. La infraestructura cuenta con un espacio de simulación quirúrgica y otro de cuidados críticos.