El portavoz de En Marea, Luís Villares, volvió a evitar pronunciarse acerca de la consulta realizada sobre la continuidad en el Parlamento gallego de la diputada Paula Quinteiro y, como ya hizo el pasado jueves –día en el que conocieron los resultados del plebiscito–, se remitió a las explicaciones que ofrezca la Coordinadora del partido instrumental.
Ayer, un día después de que Quinteiro desoyese, como ya había anunciado con anterioridad a la celebración de la consulta popular, el veredicto de las bases de En Marea que reclamaron su dimisión en un plebiscito convocado por la dirección que el sector crítico rechaza de forma tajante, Luís Villares no quiso comentar si la cúpula del partido instrumental estudia emprender otras vías para forzar la marcha de la parlamentaria que se vio envuelta en un incidente con la policía a mediados de marzo.
“La única medida a adoptar es apelar a la responsabilidad una vez escuchadas las bases”, comentó Villares, que hasta en tres ocasiones se remitió a que será la coordinadora (que equivale a la ejecutiva de un partido clásico) quien se encargue de comentar lo relativo al caso de la parlamentaria gallega.
Asimismo, Villares también se refirió a la marcha de En Marea del regidor de Teo (A Coruña), Rafa Sisto (Anova-Son de Teo), que denunció que el “proceso inquisitorial” emprendido por la dirección del partido instrumental contra Quinteiro ha sido la “gota que colmó el vaso” de una deriva en la que cree que En Marea se ha alejado de los “principios” y “objetivos” con los que nació hace casi dos años.
Cuestionado sobre este asunto, Luís Villares indicó que en la actualidad en Galicia “solo hay dos opciones antagónicas encima de la mesa”: el “proyecto” de En Marea de la “regeneración política y social” frente al “barco pirata del saqueo” que representa el PP. “Pensamos que en nuestro barco de la dignidad no sobra nadie”, comentó el portavoz.
Proceso “cerrado”
La viceportavoz de En Marea, Ana Seijas, incidió ayer en que para la dirección del partido instrumental el “proceso” de Paula Quinteiro está “cerrado” tras la celebración de la consulta que apostó por su marcha y que, ahora, es la diputada quien “tiene que asumir responsabilidades”. “Esperamos que reflexione, que asuma sus responsabilidades y muestre madurez que es necesaria en política y con la que dijimos que transformaríamos la sociedad. Quinteiro debe reflexionar sobre lo que le dijeron las bases, que son las personas que nos eligieron”, remarcó.
Mientras tanto, quien sí habló sobre la consulta y sobre la situación que vive la formación rupturista fue el secretario xeral del PPdeG, Miguel Tellado. El también diputado defendió que “cada minuto que pasa” sin que “dimita” la diputada Paula Quinteiro, quien se vio envuelta en un incidente con la Policía de Santiago en el marco de un control nocturno por vandalismo, es “un minuto que acerca a la dimisión” del portavoz de En Marea, Luís Villares.
“Sin autoridad”
Lo trasladó en rueda de prensa, después de que Quinteiro reiterase su voluntad de no dejar el escaño pese a que casi 800 militantes de En Marea, en torno al 85 por ciento de los que participaron en la consulta, se pronunciasen a favor de que diese este paso.
“Luís Villares ya demostró no tener autoridad para hacer cumplir sus mandatos dentro de su grupo y ahora va a demostrar no tener autoridad ni para hacer cumplir los mandatos de su militancia”, sentenció, antes de subrayar que, “si no lo hace, no le quedará más remedio que ser él quien deje su escaño en el Parlamento”.
“Si no lo hace, no le quedará más remedio que ser él quien dimita, porque es imposible liderar la oposición en Galicia cuando no se lidera ni siquiera un grupo de 14 personas”, zanjó Tellado, antes de ironizar con que “la nueva lección” es que “la nueva política es intentar intimidar policías haciendo uso de la condición de diputado y después aferrarse al cargo aunque los militantes pidan que se renuncie a él”.