A pocos menos de seis meses para que, si todo lo permite, se disputen los Juegos Olímpicos de Tokio, el arquero pontés Miguel Alvariño inicia de nuevo la pelea por una plaza olímpica que, cabe recordar, ya tuvo en sus manos durante dos meses el año pasado. Unos sorprendentes cambios de criterio por parte de la Federación Española de la disciplina y la desestimación de las medidas cautelares en los juzgados, “borraron” el nombre del pontés como acreedor de esta plaza. Y vuelta a empezar.
Precisamente será este fin de semana cuando tanto Alvariño, como otro pontés, Daniel Castro, inicien en Madrid una serie de clasificatorios –cinco en total, distribuidos en dos fases, después de haber anulado una primera que tendría que haberse disputado en noviembre y diciembre– que darán las plazas para unas Copas del Mundo en las que se decidirá, de nuevo, quién acude a Japón.
¿Cómo afronta estos nuevos clasificatorios después de, en su caso, además de las dificultades del coronavirus, todo lo sucedido con su plaza olímpica?
Tengo asumido que es lo que hay, y hay que volver a jugar como si fuera otro año. Ahora en esta segunda fase consiste en entrar entre los ocho mejores, así que a hacer un campeonato lo mejor posible y volver a coger el ritmo de competición, que llevamos sin hacerlo bastante tiempo..
Eso es cierto, van a comenzar una clasificación sin apenas competición a sus espaldas ¿cómo lleva esa situación?
Mis compañeros hicieron alguna competición entre ellos y cuando estuvieron en Turquía algo tiraron. Pero yo, la verdad, es que no competí absolutamente nada, nada más que Grandes Premios de este verano pasado. Pero estoy entrenando muchísimo, tirando muy bien, aunque no pude hacerlo todo lo que a mí me gustaría a 70 metros, por el tema de como está el clima aquí últimamente, que parece que se acaba el mundo.
Hoy –por el lunes– estuve tirando y me noté un pelín incómodo, pero bueno las flechas entraron en donde tenían que entrar. Poco a poco ir cogiendo forma otra vez, sentirme cómodo y tirar... Falta eso, sentirme cómodo para coger confianza, para eso están estos clasificatorios y para eso tengo que ir trabajando poco a poco. Intentar no darle mucha importancia, intentar disfrutar lo máximo posible y ya está, hay más vida que el tiro con arco.
¿Lo sucedido el pasado año le da todavía más ganas de pelear por esa plaza olímpica?
Las ganas son las mismas, mi objetivo es ir a unos Juegos Olímpicos y ser campeón olímpico, ese es mi objetivo. Ni más ni menos, las mismas. Simplemente que llevé más palos en el camino de los que debería de haber llevado, pero es lo que hay, lo que no te mata te hace más fuerte. Veremos, ya que no me mató, a ver si es verdad que me hace más fuerte.
Eso lo empezará a comprobar este fin de semana ¿no?
Bueno, este fin de semana es un aperitivo. Esto es una guerra y es la primera batalla, el que gane la primera batalla no será campeón, ni el que gane la segunda o la tercera. Esto es muy largo, hasta junio o julio queda mucho y lo importante es ir de menos a más, no de más a menos.
¿Y tiene algún contacto o referencia de cómo están sus rivales? Supongo que de Daniel sí...
Contacto sí, pero de familia. A mi no me gusta mezclar el tiro con arco con esos temas porque quieras o no pues … es mi cuñado, pero también es mi rival, lo separo. Pero tampoco me preocupa cómo estén ellos. Ya se cual es su nivel y se lo mismo que saben ellos de mí y como andamos. Tengo claro que me tengo que fijar en mí, ir mejorando, y si yo doy mi nivel pues tengo clarísimo que puedo estar ahí. No se si ser el mejor, que muy probablemente, pero por lo menos pelearlo, estar ahí. Se que este año estoy entrenando más de lo que estaba entrenando, trabajando lo mejor posible, yo más no puedo hacer. Cuando tú te vacías por dentro, lo das todo, ya está, no puedes hacer más..
Por lo que habla su rutina de trabajo está totalmente enfocada, primero, a estos selectivos
Ahora la cosa cambio, la plaza se juega en las Copas del Mundo, no en los clasificatorios. Obviamente para llegar a las Copas hay que pasar los clasificatorios, pero bueno no me estoy centrando en ganar todos los selectivos, obviamente quiero ganar, pero es un medio para llegar a un fin. No compito para perder, si estoy entrenando, este fin de semana y todos los fines de semana que vaya a competir, sea un torneo del Sílex o lo que sea, quiero ganar, pero hay que intentar ir paso a paso y como dice el Cholo, partido a partido.
El objetivo final es el que es, pero antes hay que ir haciendo cosas, mejorando y aprendiendo. No se acaba el mundo en estos selectivos, es una guerra. El objetivo de este fin de semana y el del siguiente es el de entrar entre los ocho mejores, entro primero, pues perfecto, entró octavo, pues también está bien, aunque obviamente no espero ser octavo.
Un objetivo que le ha llevado a dejar de lado, de momento, su faceta académica y laboral ¿no?
Este año no estoy estudiando, lo acabé el año pasado –cursó Automoción–. Mi idea era ir a los Juegos y luego seguir estudiando o trabajar, pero se me pospuso un año más. Si quieres ser campeón olímpico no es compatible con estar estudiando a tope. Estoy haciendo algunos cursos y otras cosas, voy mirando a ver qué puedo ir haciendo para no perder de vista la meta. El objetivo es el que es, esto pasa una vez en la vida, para estudiar hay otro año más.
Ahora tengo que aguantar un año más, porque no me queda más remedio. Y aunque no se sabe si va a haber Juegos, mucha gente dice que sí, el COE dice que sí, otra que dice que no... hay que ir paso a paso. Ahora es este fin de semana, luego veremos qué sucede. Nada está claro. Yo me centro en cada campeonato, que mi objetivo es ser campeón olímpico. Estoy entrenando a muerte, igual o más que el año pasado, no puedo estar pensando tampoco que no haya Juegos y llorar como un niño pequeño.
Esto también me sirvió para el resto de la vida. No se puede mirar tanto el futuro, hay que ir viviendo el presente, que ya hay bastantes problemas en el presente y no estar pensando constantemente en el futuro, también hay que vivir algo.