El meritorio arte de hacer fácil lo difícil

El meritorio arte de hacer fácil lo difícil
Brooke Salas debutó con el Baxi logrando 12 puntos, 6 rebotes, 3 asistencias, 2 robos y una valoración de 13 | Daniel Alexandre

Maniatar a su rival, que no se sintiese nunca cómodo y ejercer un control absoluto del juego eran las premisas con las que el Baxi Ferrol encaraba su duelo ante el Azpeitia. Las ferrolanas se alejaron bien poco de ese guion y ello les permitió que la decimoctava victoria que sube a su casillero esta temporada llegase de una forma más plácida de lo esperado teniendo en cuenta que el equipo que tenía enfrente era el tercer clasificado de su grupo.

La formación vasca transitó ayer desdibujada por A Malata. En parte debido a la ausencia por lesión de su base Green, una jugadora vital en los esquemas del equipo y que dejó huérfano al ataque de las de Andoni Lazkano; pero también, en buena medida, por todos los méritos que acumuló desde el pitido inicial el Baxi Ferrol, empeñado en no dejar que su oponente se metiese en el partido.
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Con la debutante Brooke Salas en el quinteto titular, el conjunto anfitrión salió a morder desde la primera bola en juego, construyendo desde la defensa todo su entramado. De hecho, en este fulgurante arranque, el conjunto ferrolano generó muchos problemas a su rival para encarar el aro, impidiendo en la mayoría de sus ataques el lanzamiento o concediendo acciones de tiro muy precipitadas.

El bajo porcentaje de acierto de las visitantes, que se quedaron en siete puntos en los primeros minutos, y una buena lectura ofensiva del Baxi, anotando desde el perímetro y en transición, dieron a las de casa la primera ventaja importante, con 15 puntos a su favor al término de ese primer cuarto (22-7).

Aunque el arranque del segundo fue precipitado y con un parcial de 0-6 el Azpeitia hizo un ademán de meterse en el partido, bastó con que el Baxi Ferrol imprimiese mesura a su juego de ataque para reconducir el partido, convertido durante breves instantes en un correcalles, y volver a marcar distancias. Porque, tras esos ocho primeros puntos de las visitantes en los cinco minutos iniciales, no volvieron a anotar más que un tiro libre casi rozando el descanso. Con el conjunto ferrolano otra vez afianzado sobre la cancha, la distancia volvió a crecer de forma progresiva.

Al descanso era ya de veinte puntos (36-16) y siguió incrementándose, sobre todo cuando ya en la recta final del partido encontró el acierto desde el perímetro que hasta ese momento se le había negado. Con el partido ya roto, cuatro triples consecutivos de Patri Cabrera –de nuevo junto con Dynn Leaupepe entre las máximas anotadoras y más valoradas– redondearon un abultado resultado que permitió al Baxi Ferrol solventar una contienda que, en otras circunstancias, podría haber resultado una auténtica trampa.

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