Arantxa Novo y sus compañeras de selección en los Juegos Europeos de Bakú sumaron ayer la medalla de bronce, después de imponerse en su último encuentro al combinado de Eslovenia (9-19), formación a la que ya habían ganado en la fase de grupos por un marcador muy similar.
La contienda por el tercer lugar en esta primera edición de los Juegos Europeos estuvo dominada, prácticamente desde su inicio por la formación española, que alcanzaba el ecuador del choque con una renta de seis puntos (13-7). Novo, Montenegro, Vega Gimeno y Zanoguera supieron aguantar la presión para mantener esta renta y hacerse con el bronce.
Y es que las nacionales llegaban a este encuentro “tocadas” tras quedar fuera de la final al caer en la ronda previa ante Rusia en la prórroga. En este encuentro, las españolas veían aro con facilidad en sus primeros compases, consiguiendo un favorable marcador de 8-3. Sin embargo, a partir de ahí, las defensas y los nervios se abrieron paso. Las rusas, con varios tiros libres anotados y su altura para dificultar el ataque de Novo y del resto de “rojas”, consiguió, primero igualar la contienda y, posteriormente, sumar una mínima renta de un punto. En el último ataque, “Monty” logró la canasta que llevaba a españolas y rusas a la prórroga (11-11).
Sin embargo, en este tiempo añadido, fueron las jugadoras del Este las primeras en anotar los dos puntos necesarios para hacerse con el triunfo y el pase a la final, mientras que las españolas solo anotaron uno. Precisamente las rusas lograron el oro al ganar a Ucrania (17-22).