Los duques de Cambridge no temen a romper con las tradiciones cuando se trata de su bebé. Durante su última visita a Nueva Zelanda y Australia, en contra de la tradición de encargar los cuidados infantiles a niñeras maduras, la pareja recurrió a una joven canguro de 20 años para que cuidase al príncipe Jorge, informó el diario “Mail on Sunday”. En Londres, la niñera del príncipe Jessie Webb, les ayuda a criar al bebé, pero a sus 71 años, la nanny es reacia a acompañar a la pareja en sus viajes.