El área de Patrimonio, que dirige la edil Rosa Méndez, está concluyendo la actuación de limpieza –con tala de eucaliptos incluida– en el castro de Esmelle, un importante yacimiento arqueológico, para cuyo acondicionamiento el Concello contrató a una empresa que trabajó con la supervisión arqueológica correspondiente.
Esta misma actitud es la que la concejala de Patrimonio pretende hacer llegar a los habitantes de la zona rural, en cuyas propiedades se encuentran muchos yacimientos castreños, mámoas, restos romanos y petroglifos, que deben ser conservados, tal y como se recoge en la Ley de Patrimonio del año 2016.
Estas manifestaciones arqueológicas pueden estar en propiedades privadas pero los dueños de estas tienen obligaciones a la hora de llevar a cabo cualquier tipo de actividad que pueda afectarlas. No significa, insistió Méndez, que no se pueda talar o actuar el la zona, pero se requieren los permisos oportunos y la supervisión precisa. De hecho, se mostró dispuesta a informar a todos aquellos que no sepan cómo pueden actuar en estos casos.
Aunque los elementos arqueológicos, que se calculan en torno a 90 en el municipio, están recogidos en el Plan Xeral de Ordenación Municipal con sus áreas de protección, el Concello trabaja con la arqueóloga del consistorio con el fin de remitir a los propietarios de parcelas en las que se hallen túmulos una carta recordando que se trata de bienes catalogados y que existe una normativa al respecto que hay que cumplir. Se estima que puede haber más de sesenta propietarios con restos arqueológicos en sus parcelas e incluso que alguna pertenezca a varios dueños por ocupar diversos espacios.
“Lo que no se puede hacer –explicó Rosa Méndez– es talar sin pensar que no va a pasar nada, porque hay multas importantes”. Por eso, actuaciones como las realizadas en el castro de Esmelle han sido supervisadas y se ha seguido estrictamente la ley.
Por el contrario, la semana pasada se constató una intervención irregular en el yacimiento de Vilasanche, en la que se estaba procediendo a la tala de eucaliptos en toda la croa –recinto central, más elevado– del castro. Tras avisarse al Concello, se envió a la Policía Local y se procedió a la apertura de un expediente, ya que, al parecer, no contaba con los permisos adecuados. Se dará parte, además, a la Dirección Xeral de Patrimonio de la Xunta, que es la que tiene la potestad.
También en la zona de Brión, con importante riqueza patrimonial, se ha denunciado el paso de camiones y tractores con la madera de las talas sobre los túmulos.
Precisamente la concejala de esta área también se dirigirá a la Xunta con el fin de que se se puedan señalizar todos estos restos arqueológicos, ya que es otra fórmula para que sea conocida la riqueza existente.