Los candidatos del PSOE Germán Costoya –número seis– y María Fernández Lemos –número tres– ofrecieron ayer una rueda de prensa para denunciar el caos que están provocando las obras en la ciudad y el retraso deliberado en muchas de ellas, así como la falta de control en el gasto.
Con la actuación en el Cantón de fondo, Costoya acusó a los populares de estar haciendo una ciudad “inhabitable para cada vez menos habitantes”.
En el aspecto económico, el candidato criticó el bajo nivel de ejecución de las inversiones, la mitad de lo previsto, una situación que se repitió a lo largo de todo el mandato “e da que sacan peito nuna cidade cun 30% de desemprego”. Por lo que se refiere al retraso en las obras censuró que se hagan coincidir con las elecciones “importándolles ben pouco o benestar dos ferroláns”.
Como ejemplos de esta falta de planificación y demora deliberada Germán Costoya aludió al centro cívico de Canido, para el que dijo que ya había proyecto y dotación económica cuando el PP llegó al gobierno. Con respecto al Cantón recordó que Evia había anunciado que podrían iniciarse los trabajos quince días después de finalizadas las obras de saneamiento, pero comenzaron mucho después. Criticó también que el parque Reina Sofía esté cerrado al público por una obra que pudo haberse acometido, señaló, cuando se hizo la anterior y abundó en este tema indicando que los dos espacios verdes más importantes del barrio de A Magdalena, el propio parque y el Cantón están inutilizables.
Costoya consideró asimismo “incalificables” los retrasos en el saneamiento, en las calles Basanta y Espiño y en Miramar, donde las obras financiadas con cargo al Urban todavía no han dado comienzo. Censuró también que “después de tres años sin pisar Caranza” se haya sacado ahora a concurso el proyecto del mercado, y no por falta de dinero.
“A improvisación e o gasto descontrolado é a rutina diaria do goberno”, concluyó, aludiendo a lo ocurrido con la aplicación de la ordenanza de estacionamiento o los rebacheos, además de acusar al gobierno de realizar las adjudicaciones por procedimiento negociado contratando así a sus “empresas preferidas”.
Por su parte, María Fernández lamentó que no se trate de minimizar los efectos secundarios de las obras e incidió en que la falta de inversión no es un ahorro sino que se convierte a posteriori en despilfarro por la desorganización. Señaló que el PSOE propone un plan cronográfico de ejecución de las diferentes intervenciones, estableciendo prioridades y sin invertir en espacios que no lo necesitan para ejecutar operaciones de maquillaje urbano. Abogó por actuaciones ejemplares de rehabilitación, una red de transporte público eficiente y un urbanismo de calidad, del que indicó que necesariamente es lento, frente a obras de maquillaje efímeras y costosas.
La recuperación de los barrios y su cohesión es otro de los objetivos que se plantean los socialistas, dijo María ernández Lemos, que acusó asimismo al gobierno de no haber realizado ninguna actuación en materia de vivienda.