La Policía Local puso ayer en marcha la campaña “Non deixes que o teu can se avergoñe de ti”, dirigida a los propietarios de los perros para evitar que dejen las deposiciones de sus animales en las calles y a controlar la situación de las mascotas en el municipio. La actividad se incluye a su vez entre las medidas de información y concienciación sobre el servicio de limpieza pública y recogida viaria que se anunció el pasado mes de diciembre.
Cuatro policías, dos por la mañana y dos por la tarde, iniciaron ayer la primera fase de la campaña, de carácter informativo, que se prolongará hasta el 25 de enero. Se trata de advertir sobre las conductas contrarias a las ordenanzas entregando a los propietarios de los perros folletos informativos. La próxima semana comenzarán ya las sanciones, que oscilan entre los 60 y los 300 euros.