Collado

Dentro de unos días cumple años un pintor y amigo, no estaré para darle un abrazo pero quiero desde estas líneas mostrarle todo mi cariño y respeto por los años de luz regalados a esta ciudad con sus pinturas y paisajes que trazarán en nuestra memoria por siempre lugares y poemas de colores. Collado el gran maestro de  mi hijo Hugo en el que siempre creyó y bendijo con sus clases magistrales. Él que de alguna manera nos ayudó en un tramo del camino a construir un dibujo de carne y hueso, regalándonos su fe y confianza. Porque si es un maestro del paisaje y de la pintura también es un profesor estupendo. Me observa mientras escribo estas modestas líneas una acuarela del río Belelle, que se hace y se deshace con cada mirada, se construye con la lejanía y se deshace con la cercanía como dándonos a entender que todo tiene un sitio desde donde mirarse. Este lugar entró ya en mi sueño y no lo abandonará jamás. Desde aquí te quiero mirar desde ese río compartido y recordarte y abrazarte en ese día. Todo nuestro respeto y cariño, maestro.

Collado

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