El cambio turístico a mejor

en cuestiones de turismo, una de las grandes elecciones es buscar hordas ingentes de clientes de bajo poder adquisitivo o grupos más selectos con la cartera más llena. La costa española está llena de ejemplos de los dos tipos, algunos incluso apenas separados por unos metros. Según los últimos datos publicados por el INE, parece que después de años de ser el paraíso de los que buscan sol, playa y alcohol, alcohol, alcohol –hemos venido a emborracharnos...– ahora triunfan el turismo gastronómico y el cultural. En octubre llegaron un 0,3% menos de extranjeros que en el mismo período de 2018, pero los que vinieron gastaron un 2,5% más. Los turistas que se han perdido son británicos y alemanes, las dos nacionalidades que más nos visitan. Hay más de una cervecería a punto de colgar el cartel de “se vende”, pero a cambio las estadísticas de heridos por balconing y por peleas se desploman. Todo son ventajas.

El cambio turístico a mejor

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