Los problemas de movilidad persisten mientras las administraciones recuentan los daños

Los problemas de movilidad persisten mientras las administraciones recuentan los daños
Un hombre camina junto a varios árboles caídos a consecuencia de la nevada | efe

Las localidades más afectadas por el temporal “Filomena”, especialmente en Madrid y Castilla-La Mancha, evalúan los daños para solicitar ayudas como zonas catastróficas, mientras se afanan en quitar la nieve y el hielo, que siguen provocando problemas en vías urbanas y en el tráfico por carretera, aéreo y ferroviario.

Un día más el Gobierno hizo un llamamiento a suspender cualquier desplazamiento no imprescindible, porque, aunque mejoran las condiciones y la vuelta a la normalidad está cerca, se esperan todavía temperaturas extraordinariamente bajas y el país, en palabras del titular del Interior, Fernando Grande-Marlaska, sigue en estado de alerta, “en plena emergencia”.

Marlaska insistió en que la evaluación de los daños no puede terminar hasta que concluya la situación de emergencia climatológica, pero ha garantizado que no se dejará de satisfacer las necesidades de ningún ciudadano.

Mientras, en la Comunidad de Madrid, los alcaldes y portavoces del PP en los distintos municipios se propusieron “tomar la iniciativa” y pedir “de forma generalizada” que los ayuntamientos soliciten la declaración de zona castastrófica, para lo que contarán con el apoyo del Gobierno regional y del líder del partido, Pablo Casado, que ayer reclamó “fondos Filomena” para hacer frente a los “estragos” de la “tormenta perfecta”.

El Ayuntamiento de la capital lo decidirá hoy, según ha avanzado el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, quien considera que la petición estaría justificada, porque la borrasca ha causado daños “muy importantes” en la ciudad, tanto en bienes privados, vehículos y edificios, como en sectores como la hostelería y la restauración.

Las primeras estimaciones municipales cifraban en 20,5 millones de euros los daños causados por la nieve en edificios de la ciudad.

 

Labores de recuperación

Con 1.374 kilómetros de calles madrileñas libres de nieve y hielo, miles de operarios siguen abriendo itinerarios para los peatones, tras despejar accesos a centros de salud, residencias de mayores, en centros comerciales o plataformas logísticas, y trabajan a contrarreloj ante el riesgo de caídas de árboles, con unos 150.000 ejemplares afectados.

En España, según la Dirección de Tráfico (DGT), 450 tramos de carreteras siguen afectados por la nieve y el hielo, 76 cortadas y 92, dos de ellas en la red estatal, con obligación de uso de cadenas.

Las vías más afectadas se encuentran en las provincias de Madrid, Toledo, Castellón, Valladolid, Asturias y Cuenca. Aunque continúan las dificultades de movilidad en muchos núcleos urbanos, la DGT  detectó grandes atascos en los accesos a las grandes ciudades, que, alertó Interior, dificultan los trabajos de los efectivos de emergencia y rescate.

En la red ferroviaria, según el balance realizado por el titular de Transportes, José Luis Ábalos, se restablece el servicio en gran parte de las líneas, aunque persisten los retrasos por la congelación de determinados sistemas de operación y la necesidad de limitar la velocidad en varias líneas de la alta velocidad.

Siguen también las incidencias en los trenes entre Madrid-Galicia, media distancia y Cercanías de Madrid y la conexión ente Madrid y Extremadura.

Los problemas de movilidad persisten mientras las administraciones recuentan los daños

Te puede interesar