Los ferrolanos hemos sido sacudidos emocionalmente por una joven de dieciocho años que denunció ante la policía haber sido violada por cuatro inmigrantes, retractándose al día siguiente. Los comentarios de los simpatizantes ferrolanos de Vox en las redes sociales sobre este confuso episodio, retratan la doble moral de quienes sólo se indignan si el violador es un inmigrante y la violada una española. Recuerdo que en mayo y marzo de 2023 hubo sendas agresiones sexuales a unas menores, a cargo de cinco y cuatro jóvenes ferrolanos respectivamente, que no provocaron movilización alguna entre esta gente, y el año pasado año se celebraron en Ferrol más de treinta juicios por agresiones sexuales entre personas que conviven, y tampoco tuvieron nada que decir porque para ellos es simple violencia doméstica. No es de extrañar que en paralelo al auge de sus ideas, aumenten las agresiones sexuales.