7º-16º
lunes | 29 abril | 2024
Decenas de familiares esperaban este mediodía en el Arsenal el atraque de la fragata "Álvaro de Bazán", desplegada con la OTAN en aguas del norte de Europa desde su salida del puerto ferrolano el pasado 15 de febrero. Pancartas de bienvenida y de cuenta atrás tras más de cuatro meses fuera de casa se multiplicaban entre una multitud que aguardaba la finalización de las maniobras para poder abrazar a sus parejas, hijos y, en esta ocasión -debido al fin del período escolar- también a sus padres y madres embarcados después de más de un trimestre ausentes. "Ha sido muy largo", comentaban los familiares en tierra mientras saludaban y esperaban el desembarco. La emoción se desbordó cuando los marineros pudieron bajar tras escuchar las palabras de recibimiento del comandante de la 31 Escuadrilla de Escoltas, Gonzalo Leira Neira, quien vive además sus últimos días en el cargo y será relevado precisamente por el comandante de la "Álvaro de Bazán", Jesús Viñas Barciela.
"Nos hemos desplegado una media de 219 hombres y mujeres. Salimos el 15 de febrero y hemos estado operando con el resto de unidades del Grupo Permanente de la OTAN número 1 en el mar del Norte, en el mar de Noruega, en el Atlántico Norte, en aguas del Círculo Polar Ártico y en el Báltico", explicaba Viñas Barciela tras desembarcar. "Hemos hecho tareas de seguridad marítima y también apoyo a la seguridad de los países ribereños del Báltico, que lo han apreciado y así me lo han hecho constar algunos de los embajadores. También contribuimos a la seguridad de las infraestructuras críticas en esos países del Norte, que son muy importantes no solo para ellos sino para el resto de Europa".
España está presente en toda la zona de responsabilidad de la OTAN y está determinada a apoyar los esfuerzos de disuasión y a defendernos en caso de que esa disuasión fallase
La situación internacional tras la invasión rusa de Ucrania marca estos despliegues, que se realizan dentro de la operación "Brilliant Shield". "Desde la invasión es la primera vez que nos desplegamos tanto tiempo en la VJTF, la Fuerza Conjunta de Muy Alta Disponibilidad, lo que muestra el compromiso y solidaridad de España con el resto de países aliados. España está presente en toda la zona de responsabilidad de la OTAN y está determinada a apoyar los esfuerzos de disuasión y a estar preparada para defendernos en caso de que esa disuasión fallase", añadió Viñas Barciela.
El comandante de la 31 Escuadrilla, Gonzalo Neira, quien a primera hora recibía también al BAC "Patiño" -integrado en el SNMG-2, en el Mediterráneo- en uno de los muelles de Navantia, valoró la aportación de los buques de su unidad a la OTAN. "Hoy es un día en el que se ponen de relevancia las capacidades que la Armada, y en particular la 31 Escuadrilla aportan a estos grupos navales permanentes de la OTAN, que son los de mayor disponibilidad y alistamiento y están activados para responder a cualquier crisis o a cualquier degradación del escenario de seguridad", comentó. "Es un día importante y estamos enormemente satisfechos del papel que han realizado la "Álvaro de Bazán" y también el "Patiño". Han hecho una labor fenomenal, con capacidades muy relevantes y han dejado el pabellón de la Armada y el pabellón de España altísimo".
Leira Neira dejará el mando de la 31 Escuadrilla este mes, tras haber tomado posesión en el verano de 2021. En este tiempo ha tenido que afrontar los cambios en la situación internacional tras la invasión rusa de Ucrania. Hace un balance muy positivo de estos dos años. "La 31 Escuadrilla de Superficie ha respondido muy bien a los requerimientos de las misiones, que han sido muchas y muy intensas. Se ha demandado un incremento del nivel de adiestramiento y los barcos de la 31 Escuadrilla lo han hecho de una forma absolutamente comprometida, adaptándose a las circunstancias y generando un enorme respeto y admiración entre nuestros aliados en todas las operaciones en las que han participado". Respecto a su sucesor, Jesús Viñas, afirma que "no puedo tener mejor relevo, no puede ser en mejor momento ni con un comandante más experto".
Se ha demandado un incremento en el nivel de adiestramiento y los barcos de la 31 Escuadrilla lo han hecho de una forma absolutamente comprometida
Viñas Barciela, por su parte, valoró los "casi dos intensos años" que ha estado al mando de la "Álvaro de Bazán". "Es un sabor agridulce siempre. Nos hemos preparado para estar siete meses desplegados y el resto del tiempo haciendo ejercicios e intentando dar el nivel que exige la Armada para que un buque pueda operar en la OTAN, que es muy exigente. Dejo el barco el día 30 con mucha pena; ha sido una experiencia increíble que nunca volveré a vivir pero por delante tengo otros retos".
Tanto Gonzalo Neira como Jesús Viñas valoraron el compromiso de la dotación y su rendimiento en las misiones, operando en entornos difíciles -en el caso de la F-101, por encima del Círculo Polar Ártico, con bajas temperaturas y mucha mar-. "Que todo el mundo haya respondido es un orgullo para mí como comandante", apuntaba Barciela.
