Las colonias felinas ferrolanas, como las de otros concellos que iniciaron antes este período de adaptación a la ley de Bienestar Animal, ya se encuentran debidamente señalizadas en los distintos barrios donde se encuentran agrupaciones de gatos ferales. Hasta 40 colonias se contabilizan en Ferrol actualmente.
Este ha sido el primer paso tras la aprobación el pasado mes de enero de una moción presentada por la oposición y a la que, paulatinamente, se está dando debido cumplimiento.
En la propuesta que se aprobó en el pleno se pedía que se dignificase la labor de las personas que atienden a los gatos de las colonias, sin retribución y sin apoyo municipal alguno, además de la señalización y el establecimiento de los derechos y deberes de esos voluntarios.
En este sentido, esta misma semana se abordó en comisión informativa el reparto al voluntariado de los carnés identificativos. Unos sesenta voluntarios recibirán estas tarjetas, que expide la concejalía de Benestar animal, y que los define como cuidadores de colonias felinas, con su pertinente número.
Pero, además, el Concello dispone ya de un informe-propuesta en el que se establecen los derechos y deberes de estas personas que se encargarán del cuidado de los gatos ferales, cuyos múltiples emplazamientos están en proceso de mapeo, además de establecer también las labores que son competencia del Concello.
En el este sentido, se reconoce como competencia municipal la vigilancia y el control sanitario de las colonias y la posibilidad de reconocer como voluntarios a quienes estén inscritos como individuos o entidades de acción voluntaria, organizados por la administración.
Serán derechos de esos cuidadores felinos el ser tratados sin ningún tipo de discriminación con respecto a su libertad y creencias, además de ser formados e informados en materia de prevención de riesgos y las condiciones de seguridad, higiene y salud que reclamen.
Otra de las cuestiones que se recoge en el informe es la necesidad de contar con una acreditación identificativa que se le reconozca como voluntaria, y que ya han sido elaboradas por el Concello para su reparto.
Dispondrán, además, de una póliza de seguro que cubra los riesgos de accidente de la propia persona voluntaria, así como los daños o pérdidas causadas a terceros por su labor.
Como deberes que tienen que cumplir estos voluntarios se recogen, además de actuar de forma coordinada, responsable y solidaria en su labor, la asistencia a actividades formativas que se programen, el rechazo a contraprestaciones por su actividad, el uso debido de su acreditación identificativa o de los recursos materiales que haya a su disposición.
Las personas que ya han sido seleccionadas como voluntarias ejercerán su labor en las colonias que están reconocidas e identificadas por el Concello pero también podrán atender a gatos ferales aislados que lo precisen.