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jueves | 25 abril | 2024
Nueva estación y cambio de tiempo. Así se espera el aterrizaje del otoño tras un verano que se tradujo en esta zona de Ferrol en casi el más cálido que se recuerda y con menos precipitaciones.
Las lluvias, si bien no todavía muy fuertes, anunciadas para este fin de semana, darán una tregua a cuatro meses en los que solo se contabilizaron en la estación situada en el CIS de Ferrol un total de 33 días con precipitaciones, una cifra que, desde el año 2001 que se contabilizan en la web de información de Meteogalicia, no se recuerda salvo en el año 2018, donde también se produjo un verano seco, con 32 días de agua. Salvo ese año y 2004, que tampoco tuvo más de 32 días con precipitaciones, todos rondaron los 40 e incluso llegaron en algunos casos –2011 o 2014– al medio centenar de días de verano con agua. La media de las dos últimas décadas fue de unos 40 días, en la estación estival, más concretamente contabilizando al completo los meses de junio a septiembre.
Si bien el verano no comenzó tan seco como cabía esperar, ya que hubo en junio 17 días de lluvia, casi el más lluvioso desde 2015, con la llegada de julio la situación cambió por completo, ya que solamente se contabilizaron cuatro días con caída de precipitaciones. Muy lejos de los 14 del año anterior, del 2020 y todavía muchos menos de los 14 de 2019 o los 13 de 2018.
La situación se repitió llegado agosto, el mes estival por excelencia. Los únicos cuatro días de lluvias solo se repitieron en una ocasión en la última década. Por su parte septiembre registró hasta este fin de semana ocho días de lluvia, también muy pocas para el mes en el que se recibe la llegada del otoño.
Pero si las precipitaciones fueron escasas, las temperaturas también se salieron de lo que es habitual en esta zona de Galicia, ya que si bien la subida de los termómetros viene siendo más habitual en el sur de Galicia, Ferrol no se caracteriza por un calor excesivo en los meses estivales.
Este verano, sin embargo, desde junio a septiembre se superaron las temperaturas medias habituales de los meses de verano de las últimas décadas. No se recuerda en esta zona un mes de julio tan cálido –el más similar fue el de 2013, que también fue, además, muy seco– y el mes de agosto tampoco tuvo precedentes en cuanto a temperaturas –solo fue superado por unas décimas de temperatura media el agosto de 2018, en el que, sin embargo, llovió más–.
También el mes de septiembre ha sido cálido, por el momento, y la temperatura marcó récords históricos, solo superada por 2018, que sí tuvo un septiembre más caluroso, aunque similar, e incluso con menos lluvias.
Llegado el otoño, las previsiones cambian de forma rotunda, con nubes y lluvias para el fin de semana y aunque las predicciones para Galicia hablan de una mayor probabilidad de que las temperaturas sean más altas de lo normal para esta estación, el comienzo sí es acorde a lo que corresponde para estas fechas.
Para la próxima semana se prevén bajadas de temperaturas pero el trimestre de octubre, noviembre y diciembre se plantea –a nivel gallego– con precipitaciones “por debajo de lo normal” y temperaturas “con probabilidad de que sean más altas de lo normal”, según la Agencia Estatal de Meteorología –Aemet–.
Si bien es verdad que el clima para el mes de otoño se anuncia como “agradable”, es una buena idea contar con algo de ropa de abrigo, por lo que será el momento de recuperar las chaquetas que nunca tuvieron tan poco uso como el verano que se acaba de despedir.
A falta de una previsión concreta para Ferrol, las predicciones señalan que habrá muchos días de lluvia durante octubre en Galicia. Se espera un promedio de 15 a 22 días, lo que viene siendo habitual en los últimos años, con la excepción de 2018 que solo tuvo una decena de días lluviosos.
