Cáritas Mondoñedo-Ferrol abordó el pasado sábado, durante la ruta de la “Línea 105”, algunos aspectos de su memoria de 2024, cuyos datos pudieron conocer en primicia quienes tomaron parte en la referida visita, en la que se mostró en qué se invierte todo el dinero que les llega a través de la asignación tributaria.
La entidad, a través de sus diferentes áreas de actuación, atendió el año pasado a 4.773 personas, 3.206 situadas en el arciprestazgo de Ferrol (que engloba los municipios ferrolano, nedense, naronés y valdoviñés); 399 en el arciprestazgo de Ortegal; 364 en el de Mondoñedo y 804 en el Terra Chá, estos dos últimos en la provincia de Lugo. La cifra es muy similar a la de 2023, con 4.701 ciudadanos atendidos.
Por áreas de actuación, la mayor parte de quienes se acercaron a la institución en busca de amparo fue en el ámbito de la acogida y ayudas de emergencia o promoción, con un total de 3.968 beneficiarios. De estos, el 54% fueron mujeres y el 67% población migrante. También se ofreció asesoramiento jurídico a 694 ciudadanos, 42,94% hombres. La totalidad de estas consultas fueron realizadas por extranjeros.
La unidad de Vivienda ayudó a 61 usuarios y ellas representaron el 55,74% del total y en su mayoría eran migrantes (86,89%). El área de Atención a Personas sin Hogar amparó a 688 personas, de las cuales el 51,60% fueron migrantes y en mayoritariamente hombres, llegando a prácticamente el 85% total de los casos. Por su parte, la delegación de Familia e Infancia atendió a 198 personas (51,1% receptoras y 88,38% migrantes).
En el departamento de formación e inserción laboral se prestó soporte a 268 ciudadanos, siendo el 52,99% mujeres y mayormente llegadas de otros países (85,82%). Asimismo, el departamento que se ocupa de los mayores y el área de envejecimiento ayudó a 86 beneficiarios, de los cuales el 96,51% eran usuarias, siendo en gran parte ciudadanas españolas, representando a más del 90% del total.
En todas las áreas se ha incrementado la ayuda con respecto al ejercicio pasado, si bien este es leve. Cabe destacar que del total de los 4.773 atendidos, 2.954 recibieron apoyo para cubrir sus necesidades básicas, las denominadas ayudas de emergencia.
En cifras redondas, en todas las áreas se prestó ayuda a 2.403 hombres y 2.370 mujeres. De estos, 1.709 tenían nacionalidad española, frente a 3.064 extranjeros. Asimismo, 1.174 beneficiarios tenían menos de 18 años, frente a 1.513 que tenían entre 18 y 35; 1.809, entre 36 y 65 –la franja de edad más numerosa– y 277 mayores de 65 años.
Para poder realizar estas funciones, Cáritas Diocesana ha contado con una extensa red de voluntarios. En total son 350 aquellos que aportan su experiencia y su tiempo. Por áreas, donde más voluntarios se emplean es en la de acogida y promoción (218), mientras que en familia e infancia son 53. En los centros destinados a las personas sin hogar se repite esta última cifra, y en acciones encaminadas a dar soporte a mayores y al envejecimiento, se sumarían 47 personas más.
De la misma manera, la entidad caritativa cuenta con 15 trabajadores para dar forma a toda su acción social y dispone de una red de socios colaboradores y donantes que asciende a un total de 1.030 personas.
Cáritas dispone de una red de viviendas para familias que carecen de recursos. Estas se encuentran en los ayuntamientos de Ferrol, Narón, As Pontes, Cedeira y también en Viveiro y Castro de Rei. El tiempo medio de estancia en estos espacios es de unos 359 días, un periodo que se considera necesario para que una familia pueda arreglar sus papeles y su situación legal, si los tuviera pendientes, y pueda encontrar un trabajo para poder tener independencia económica. Desde Cáritas defienden que “un hogar trasciende al mero alojamiento, es un espacio seguro que restaura la dignidad social”.