El gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha mostrado este miércoles su temor a que la incertidumbre política actual acabe afectando negativamente a las decisiones de inversión por parte de las empresas y con ello a la senda de crecimiento económico futuro.
En su intervención en la XIV Edición del Spain Investor’s Day, Hernández de Cos ha explicado que, según la última Encuesta del Banco de España sobre la Actividad Empresarial, en el último trimestre de 2023 las empresas percibieron, por segundo trimestre consecutivo, un aumento de la incertidumbre sobre la política económica.
Esa percepción afectaría negativamente a seis de cada diez compañías encuestadas, de forma que se convirtió en el principal factor condicionante de la actividad empresarial.
De mantenerse, ha advertido el gobernador, estas dinámicas “podrían llegar a incidir negativamente sobre las decisiones de inversión empresarial y sobre la senda de crecimiento futuro”.
El Banco de España ha vuelto a asegurar que los datos del cuarto trimestre de 2023 sugieren un avance del PIB similar al 0,3 % del tercer trimestre y, sobre la inflación, ha señalado que se espera “un leve repunte a comienzos de 2024” para retomar la senda descendente a partir de la segunda mitad.
Respecto a la política monetaria, Hernández de Cos ha insistido en la idea del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo de que si mantienen el nivel actual de los tipos durante el tiempo suficiente, se podrá alcanzar el objetivo de inflación del 2 % en el medio plazo.
La evolución de la inflación y las proyecciones económicas apoyan esta idea, así como el hecho de que la política monetaria continúa transmitiéndose con fuerza a las condiciones de financiación, incluso por encima de lo esperado, ha añadido el gobernador.
La cuestión relevante, no obstante, es “por cuánto tiempo” será necesario mantener los tipos de interés en el nivel actual, antes de comenzar a reducirlos gradualmente, según ha explicado, lo que dependerá de la evolución futura de los datos, en un contexto en el que el nivel de incertidumbre sigue siendo elevado.
En clave nacional, Hernández de Cos ha vuelto a considerar que la política fiscal debería orientarse a lograr una reducción gradual de los elevados niveles de deuda pública y ha insistido en su tesis de que hay que acometer reformas estructurales para mejorar la productividad.