Un guion similar al de otros partidos de la temporada le trajo al Racing una nueva derrota. El equipo ferrolano perdió en Albacete porque el cuadro manchego aprovechó dos de las pocas ocasiones que tuvo y, mientras, el ferrolano no fue capaz de transformar ninguna de las que dispuso. De ahí el resultado, tanto del encuentro como de la temporada, cosechado por el equipo ferrolano.
 

Sin nada realmente importante en juego a nivel clasificatorio, ni Albacete ni Racing le pusieron demasiadas restricciones a su juego. Así que las llegadas a ambas porterías fueron más o menos constantes y el cuadro manchego aprovechó una de sus primeras para adelantarse en el marcador. Fue en una acción a balón parado en la que la pelota que quedó suelta tras el rechace de Yoel Rodríguez (que ayer recuepró la titularidad) fue rematada por Nabil para poner por delante a los suyos.
 

El gol en contra no cambió demasiado la manera de jugar del equipo ferrolano, que a la contra generó situaciones para recuperar el empate –un disparo fuera de Álvaro Giménez tras el pase de Álvaro Sanz fue la más clara–. En cambio, el cuadro manchego empezó a encontrar espacios para causar daño a su rival, pero le faltó acierto en la finalización en acciones como las que tuvieron Morcillo o Kofane, que no fueron capaces de resolver.
 

Poco a poco, el ida y vuelta constante que caracterizó el encuentro en la primera parte fue decreciendo. Así que las llegadas a cualquiera de las dos porterías empezaron a descender hasta llegar el descanso con ambos tratando de mejorar sus situaciones.

Solidez

Recuperadas las fuerzas tras el descanso, el partido volvió a adentrarse en constantes transiciones en las que el Racing estuvo más cerca de marcar, tanto en acciones combinadas –Dorrio dispuso de las mejores opciones– como en otras a balón parado –ahí Puric estuvo a punto de anotar–. Pero, como ha venido siendo constante esta temporada, el conjunto de la ciudad naval no pudo conseguir el tanto, sino que se quedó con el resultado de derrota.
 

Igual que en la primera parte había sido el Albacete el que tuvo más control, aunque sin demasiadas ocasiones, en la segunda parte fue el Racing el que ejerció el dominio... pero también sin oportunidades. Lo que pasa es que la expulsión sufrida por Puric –por exceso de ímpetu– a un cuarto de hora para el final condicionó sus posibilidades, aunque el cuadro verde siguió dominando.
 

Sin demasiadas cosas que hacer en el tramo final, la expulsión a David Castro terminó de decantar el partido, sobre todo porque en esa falta Higinio marcó el segundo tanto de los suyos y ahí terminó todo el interés del enfrentamiento.

FICHA TÉCNICA