Dos derrotas, dos sabores

SANDRA PRIETO: “SE VE UNA EVOLUCIÓN Y ES LO IMPORTANTE”

Aunque al Baxi Ferrol, por la situación clasificatoria en la que está –último de la Liga Dia, sin estrenar aún su casillero de victorias– le duela especialmente perder un partido como el que sábado lo enfrentó al Lointek Gernika, que iba ganando con cierta comodidad a pocos minutos para el final del mismo, su entrenadora, Sandra Prieto, lanzaba un mensaje optimista al final del choque. “Cuando llegamos a la prórroga me di cuenta de que se nos escapaba el partido, porque estábamos fundidas”, recuerda. Sin embargo, la preparadora destacó que “hay una evolución, sí. Fuimos capaces de plantar cara a un equipo muy bueno y, sobre todo, se van viendo cosas”, dijo.

Pero, al margen del dolor que sintió Sandra Prieto por el resultado –“nos ha faltado templanza y, como pensábamos que este era un partido imposible pero en realidad lo hemos tenido tan cerca, te sientes peor”, insistió–, la preparadora se quedó con las cosas buenas hechas durante el encuentro. “Se vio más entendimiento, el equipo estuvo más apretado y trabajó junto”, explicó antes de apuntar que la evolución la notó, sobre todo, en el aspecto defensivo. “En ataque aún nos cuesta seguir unas normas mínimas, pero en defensa estuvimos mucho más duras, haciendo más ayudas que antes no nos salían de manera natural”, incidió.

Con estos ingredientes, a partir de ahora la entrenadora del Baxi Ferrol apuesta por quedarse con las cosas positivas para que el equipo de la ciudad naval, aunque todavía le queda un partido ante un adversario de un gran nivel como es el Spar Citylift Girona, pueden ir hacia arriba. Será la manera de que el cuadro de la ciudad naval empiece a darle la vuelta al mal arranque de competición que ha realizado para, de esta manera, mantenerse entre la elite femenina del baloncesto español con vistas a otra temporada más.

DIEGO RÍOS: “NO LOGRAMOS SER FUERTES MENTALMENTE”

La derrota con la que O Parrulo Ferrol saldó su partido del pasado sábado frente al Peñíscola RehabMedic supuso para el entrenador del equipo ferrolano, Diego Ríos, “un paso atrás. Sobre todo a nivel mental”. Y es que el preparador lucense reconoció irse muy cabreado del encuentro en la localidad castellonense, porque “creo que hicimos una primera parte brillante, en la línea de cómo estábamos jugando fuera de casa, siendo un equipo muy peligroso”, pero todo cambió tras el descanso.

Diego Ríos recordó que “incluso pudimos irnos con más ventaja en el marcador, porque un 0-2 no hubiera sido descabellado”, sobre todo por lo hecho en varios aspectos –“hacíamos daño en estrategia y en juego posicional; la primera parte fue completísima”, destacó“–. Sin embargo, a pesar de que el objetivo de cara a la segunda parte era “seguir en la misma línea, en realidad terminó siendo todo lo contrario. En este sentido, Diego Ríos comparó lo vivido en Peñíscola con fases de lo que sucedió el martes de la semana pasada en el encuentro frente al Levante. “No creímos que podíamos hacer las cosas bien y pensar que podíamos darle la vuelta al partido, incluso cuando el marcador estaba igualado”, explicó. De ahí que el preparador hiciese autocrítica el señalar que “como entrenador no estoy consiguiendo que mi equipo sea mentalmente fuerte. Y si no damos ese paso seremos un equipo que luche para no descender y no por metas mayores”.

Es algo que el entrenador de O Parrulo tratará de corregir en los próximos días para, de esta manera, llegar en las mejores condiciones al partido de este sábado contra el Jaén Paraíso Interior. En él, el cuadro de la ciudad naval espera volver a reencontrarse con la victoria.