Con el sistema lumínico de A Malata ya en renovación, el estadio ferrolano vive durante estos días otros trabajos, en este caso ya más habituales como es el mantenimiento del terreno de juego.
Con el objetivo de contar con el estadio en perfectas condiciones para el inicio de campaña a finales de agosto, así como que esta puesta a punto sea la base para superar toda la temporada –especialmente los meses más duros a nivel meteorológico–, la empresa Calfensa comenzó esta semana los trabajos.
Primero, con un decapado del campo, en una primera fase en la que asimismo será extraída la cubierta vegetal para eliminar la capa de materia orgánica acumulada en la parte aérea del césped y en el suelo.
Asimismo se llevarán a cabo otros trabajos como el pinchado hueco del terreno, recebado –aplicación de una fina capa de arena y materia orgánica para mejorar la estructura–, siembra y descompactación. Unas tareas de mantenimiento que se están llevando a cabo también en A Gándara, con escarificado previo. Un trabajo más avanzado aquí, ya que será donde se realice la pretemporada.