La mala fortuna quiso que Víctor Moya, Chuca, se perdiese gran parte de los duelos que el Racing de Ferrol disputó hasta la fecha en su regreso al fútbol profesional. Las lesiones frenaron en seco el buen hacer de este mediocentro que el pasado fin de semana en A Malata hizo frente a su segundo mayor número de minutos este ejercicio, un total de 51 –sólo superados por los 61 de la primera jornada ante el Elche–, en el que fue su séptima presencia en el terreno de juego esta temporada.
Una cifra que podría aumentar en el duelo del domingo, en el que, además, el futbolista vuelve a casa, concretamente a poco más de 50 minutos de su Jacarilla natal. “El Eldense es muy fuerte en su campo, da igual que tú estés tercero o cuarto y ellos un poco más abajo, van a luchar, están en su casa y con su gente. Saldrán a tope”, señala Chuca. Él mismo también recibirá parte de ese apoyo de la grada del Pepico Amat debido a la cercanía con su pueblo natal. “Estoy contento de volver a mi tierra. Vendrá mucha familia a apoyarme y espero que se haga un buen partido”, señalaba el futbolista , para ello la clave para él es “enfocarnos en nosotros mismos. Estar tranquilos, salir desde los primeros minutos al cien por cien. Los resultados fuera de casa son muy importantes para estar arriba”.
La alegría de Chuca para este duelo es, de inicio, doble –puede pasar a triple si el Racing gana–. Primero, como él mismo señala, por volver a casa y, segundo, porque todo parece indicar que ha superado la racha de lesiones que sólo le han permitido participar en seis duelos hasta la fecha. “Estoy al cien por cien y dispuesto, como pasó el otro día, a jugar 60 minutos y me encontré bastante bien”, comenta el mediocentro, “nunca me habían aparecido tantas lesiones así de repente, pero al final uno aprende de estas cosas para recuperarse y volver a lo que más me gusta, jugar al fútbol”.
Con el trabajo hecho –y estando “muy tranquilo”–, continuidad es la X que resta por despejar ahora en la ecuación del regreso de Chuca. Una operación que espera se pueda prolongar lo que resta de campaña “quince partidos en los que estoy seguro de que lo haré bien”, señala y sin que la minirracha de dos duelos sin marcar de los suyos preocupe. El valenciano busca ahora seguir reivindicándose y buscar ese lugar que casi parecía llevar su nombre hasta la llegada de lo que hasta ahora parecía la maldición de Chuca, ya superada.