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jueves | 25 abril | 2024
Ha llegado el final del verano, volvemos más relajadas, aún bronceadas y con ánimo para enfrentarnos a lo que nos echen… pero ¿y nuestro pelo?
Probablemente el cabello habrá perdido el lustre con el que comenzamos las vacaciones. La mayor exposición al sol y al viento durante el verano ha dejado su huella en forma de sequedad, puntas abiertas y pérdida de brillo. Es el momento de actuar para recuperar nuestra melena, así que hemos consultado con Batiste, y los expertos nos han recomendado los siguientes consejos:
Sabemos que a veces nos cuesta, pero después de deshacernos de los dos o tres centímetros finales, veremos cómo nuestro pelo está más flexible, pulido y bonito. El cabello recupera movimiento y enmarca mejor nuestras facciones. Es una apuesta segura.
Hay productos específicos, para aplicarlos en casa una o dos veces por semana, o incluso a diario, y nos los debe recomendar un profesional para hacer un buen mantenimiento. Pero lo ideal para empezar es que nos hagan un tratamiento de choque al volver del verano en nuestro salón de peluquería. Son productos específicos, y aplicados profesionalmente, nos garantizan una hidratación visible y duradera.
Nuestro pelo puede necesitar aportes extra de nutrición, un tratamiento con queratina, o de aceites esenciales. Es preciso que nos dejemos aconsejar por un profesional, ya que los requerimientos de nuestro tipo de cabello son distintos en cada caso y debemos pensar que lo que a una melena le conviene, a otra no.
Debemos usarlas según la necesidad de nuestro cabello. Hay mascarillas nutritivas, para usar una o dos veces por semana; también reparadoras, que ayudan a mantener sana la fibra capilar, fortalecen y evitan roturas. Se aplican tras el lavado habitual, se dejan unos minutos y se aclaran. También las hay para aplicar previamente al lavado, pero en este caso hay que dejarlas más tiempo. Es preciso consultar siempre a un profesional que nos aconseje cuál es mejor para nuestro tipo de cabello.
Nos aporta brillo y suavidad, y nos da apariencia de pelo sano. Se aplica siempre en las puntas, con lo que no hay inconveniente en usarlo incluso en cabellos grasos. Tras el lavado nos aplicamos una dosis, y se puede realizar tanto en cabello mojado como en seco.
Aunque ya no hace tan buen tiempo y nuestro cabello apenas se seca al aire, no debemos excedernos con la aplicación de calor. Siempre es mejor una temperatura media para evitar mayor sequedad y deshidratación. La excepción a esto son los tratamientos en salón de peluquería, ya que algunos tratamientos precisan calor, pero siempre en manos de profesionales.
En resumen, tras el verano tenemos que mimar un poquito nuestro cabello hidratando, cortando lo estropeado y tratándolo para que recupere su fuerza y brillo. Si quieres informarte para saber más consejos y trucos de profesionales, entra en el blog de Batiste. Y ten un feliz otoño.
