El Centro Sociocultural O Ensanche acogerá esta tarde una mesa de diálogo con el objetivo de ofrecer soluciones a las personas y comunidades que desde hace un tiempo vienen sufriendo problemas de convivencia en la zona nueva de Santiago. En el encuentro participarán varias asociaciones de vecinos y la Policía Local, y se centrará en presentar un mapa de incidencias que refleje la realidad de la situación.
Concretamente, son siete los puntos que concentran los ruidos y problemáticas de las que se quejan los residentes: las calles Santiago de Chile, República Argentina, Alfredo Brañas, Nueva de Abajo, La Rosa, Santiago del Estero y Fernando III; todas ellas en el área del Ensanche.
En el caso de Santiago de Chile, las críticas ponen el foco sobre las viviendas estudiantiles y el ruido que provocan en las noches. Además de la contaminación acústica, el vecindario también se ha quejado por el rastro que dejan las concentraciones de personas en los locales nocturnos. Concretamente, basura y orines.
De forma semejante, tal y como recoge el parte de la Asociación Veciñal Raigame, en la calle República de Argentina las molestias vienen dadas por el alboroto y los desperfectos que causan las aglomeraciones en la puerta de las discotecas, cuyo horario de cierre es demasiado tarde para algunos residentes. Lo mismo que sucede en las calles Alfredo Brañas, Santiago del Estero, Nueva de Abajo y Fernando III. En esta última, además, los vecinos han reportado varias peleas.
En cualquier caso, el ocio nocturno no es la fuente de todas las quejas. La contaminación lumínica que provoca la pantalla LED del Hórreo —ubicada frente a la gasolinera Galuresa— molesta a los moradores de los edificios que están cerca, como también lo hacen las actividades de danza y acondicionamiento físico organizadas por un gimnasio en La Rosa.
La reunión aguarda visibilizar el malestar de algunos de los vecinos de las zonas afectadas que, fundamentalmente, reclaman aumentar la presencia policial en los puntos con mayor ruido.