Un año más, y con este ya van 25, el municipio naronés no dudó en respaldar el Oenach Atlántico –Fiesta de Interés Turístico por la Xunta desde 2014–, una celebración del pasado local que permite retornar durante este fin de semana al modo de vida castrexo. En concreto, es en la campa de O Trece, en Sedes, donde durante tres jornadas, contando con la de ayer, se hará una peculiar vuelta a los orígenes celtas.
De hecho, el pistoletazo de salida tuvo lugar durante la tarde de este viernes cuando, a partir de las 18.00 horas, se pudo disfrutar de la gran cantidad de puestos que ofertan tanto la Feria de artesanía como el Mercadiño artesán, espacios que hicieron de antesala al encendido de luces en la zona, lo que marcaba el inicio de la actividad, contando, para ello, con la actuación de Xurxo Fernandes en la que se pudo disfrutar de una fusión de la tradición gallega con la judía, remontándose al mismísimo Imperio otomano, remarcando, así, la relevancia del patrimonio histórico en la cita de Sedes.
El público estuvo, sin lugar a dudas, a la altura del acontecimiento y no es de extrañar, puesto que la organización está en sus manos. La AVV Rosa dos Ventos y la Grande Compañía de Teatro de Sedes son –junto con el Concello– impulsores de esta cita, que durante este sábado 2 de agosto cobrará suma importancia.
La jornada dará comienzo a las 11.00 horas con la apertura de los diversos puestos, coincidiendo con un sinfín de propuestas pensadas para que disfruten pequeños y mayores.
La banda sonora vendrá de la mano de la Charanga Alxibeira (13.00) como antesala a una degustación culinaria que se podrá llevar a cabo en los diferentes espacios habilitados para la ocasión –servicio que se repetirá también durante el mediodía de mañana domingo–.
Habrá que esperar a primera hora de la tarde (16.00) para poder participar o quizá echar alguna revancha en los diversos juegos populares.
Con el apetito saciado, tanto en lo relativo a los manjares como a la competición, llegará el turno de disfrutar de la buena música que, en esta ocasión, vendrá de la mano de “Son animal”, el último trabajo de Paco Nogueiras, un total de doce temas que acogen todo tipo de ritmos, sin entender de procedencias, pero con un nexo común: los ecos de la fauna.
Los ritmos tradicionales, indispensables en una cita como esta, no podían faltar y qué mejor que los de casa para interpretarlos. Así, a partir de las siete de la tarde, amenizará la sesión de tarde Banda de Gaitas do Padroado da Cultura.
Aunque parezca que el día no puede ir a mejor, no es así. Y es que el plato fuerte se reservará hasta las 23.00 horas con “Noites do Castro”. En este punto, los vecinos y vecinas se convertirán en el epicentro, como ya marca la tradición, con una representación teatral que, en esta vigesimoquinta edición, lleva por título “A viaxe de Martiño”.
Durante el día 3, último del programa, aún quedará mucho por hacer. Puestos y actividades lúdicas retomarán su actividad, esta vez acompañados de una muestra de Can de Palleiro en las inmediaciones del recinto ferial de O Trece.
A media mañana llegará el teatro, otra vez gracias a los residentes de la zona, que pondrán sobre las tablas “Lendas castrexas”.
No podía faltar una sesión vermú, a la una de la tarde, de la mano de Boj. Ricardo Mouriño, Fausto Escrigas, Rubén Gómez, Pablo Vergara y Cibrán Seixo –ganadores del Concurso Runas 2016 del Festival Internacional de Mundo Celta de Ortigueira– presentarán “Hora Zulú”, el último trabajo del grupo que vio la luz en el mes de mayo.
Para hacer una pausa en los juegos populares, a las 18.00 horas llegará Teatro Gazafelhos con una obra para público familiar que lleva como título “Historias para escagarriñarse”.
Después de aproximadamente una hora de función, habrá llegado el punto de volver al presente y despedir uno de los fines de semana más importantes para Narón. La campa castrexa acogerá el acto de clausura, que pondrá punto final a las festividades con un concierto de música tradicional de la mano de la formación Tres Pesos.
De esta manera, una vez más se reforzará una identidad volviendo a los orígenes. Sedes recordará, de esta manera, lo que un día fue presente, pero todo ello sin perder de vista un futuro que, sin lugar a dudas, vaticina que el año que viene serán 26 las velas sobre la tarta.