El presidente ruso, Vladimir Putin, firmó una ley que estipula que los extranjeros que sirvan en el Ejército pueden solicitar la ciudadanía sin presentar un permiso de residencia. Los militares extranjeros contratados están exentos de tener que vivir durante cinco años en Rusia después de obtener un permiso de residencia antes de solicitar la ciudadanía. Más fácil lo tuvo Gérard Depardieu cuando Vladimiro le concedió la ciudadanía sin más problemas, cuando huyó de los impuestos que impuso el presidente Hollande a las grandes fortunas. Aquí no pasará nada parecido de momento.